La Fiscalía General del Estado de Jalisco investiga a cinco personas detenidas como probables responsables del homicidio del alcalde de Tecalitlán, Víctor Díaz Contreras.
Tres de los detenidos portaban armas de fuego y los otros dos transportaban varias dosis de droga.
Se informó también que policías estatales cumplimentaron una orden de cateo en una finca, propiedad de los presuntos atacantes, que se ubica sobre la calle Pablo Barón Barrera en Tecalitlán.
En el domicilio también se aseguraron algunos vehículos.
Este miércoles, familiares, amigos, autoridades y habitantes de Tecalitlán, despidieron al alcalde Víctor Díaz Contreras, asesinado el pasado lunes en la colonia Real de Minas.
Con música de mariachi, su cuerpo fue acompañado desde el templo donde se celebró una misa de cuerpo presente hasta el atrio de la Presidencia Municipal de Tecalitlán.
Víctor tú luchaste por nuestro pueblo y por nuestra gente, tú luchaste por ver sonreír a las familias Tecalitlenses y luchaste hasta el último día, hasta el último momento aliento, el agradecimiento tiene contigo es infinitamente y sincero”, señaló Jorge Valencia, secretario de Ayuntamiento Tecalitlán
Posteriormente, su cuerpo fue trasladado al Panteón Municipal de Tecalitlán.
Las autoridades informaron que la funcionaria del Registro Civil que acompañaba al alcalde Víctor Díaz Contreras, en el momento del ataque, sigue internada en un hospital de Ciudad Guzmán, donde se reporta como estable.
Detienen en Jalisco a dos hombres, uno entre los más buscados en EU
Manelich Castilla Cravioto, comisionado general de la Policía Federal, anunció la detención de Arnulfo “G” y Ulises “G”, uno se encuentra en la lista de los hombres más buscados por autoridades de Estados Unidos (EU).
El funcionario detalló en una conferencia que la detención se realizó en Jalisco por fuerzas especiales y sin la necesidad de realizar disparos.
Explicó que de acuerdo a información de la Policía Federal, Arnulfo “G” estableció su centro de operaciones en Bolivia, en 2016, donde formó una estructura financiera enfocada al lavado de dinero a través de la compra, venta y renta de bienes inmuebles, la que también servía de enlace con proveedores de cocaína en países de América de sur. La droga era enviada a México para su distribución y venta en algunos estados y para ser enviada a Estados Unidos.
Arnulfo “G” se ostentaba con identificaciones apócrifas y nombres falsos para no ser detectado por las autoridades.
En la oficina de control de activos extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos se agregó a Arnulfo ‘G’ en la lista negra.
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Con información de corresponsales
MAP
