ECONOMíA

Finanzas públicas confiables, reto del próximo Gobierno, dice director de ‘El Economista’

Las finanzas públicas de México sí están sanas, pero no están a prueba de balas, por lo que uno de los mayores retos del próximo Gobierno será mantener la confianza en éstas al trabajar en la política fiscal, el nivel de deuda pública amplio que deja el Gobierno actual y los cambios en el gasto público y en el pago de pensiones por el cambio demográfico. Así lo consideró Luis Miguel González, director general editorial de ‘El Economista‘ en entrevista con Raymundo Riva Palacio para ‘Estrictamente Personal’.

El periodista argumentó también que si bien el nivel de deuda pública ha disminuido en los últimos dos años, este gasto vuelve vulnerable a las finanzas públicas a movimientos de tipos de interés, tanto extranjeros como nacionales.

Con respecto al gasto público, Luis Miguel González prevé que el envejecimiento de la población presionará más a las finanzas públicas durante el próximo sexenio, pues el Gobierno ha requerido transferencias del Banco de México (Banxico) para lograr un superávit en el pago de las pensiones durante los últimos años.

González dijo que el nuevo Gobierno de la República debe generar confianza entre los inversionistas internacionales, lo cual consideró como “el gran reto” en el ámbito internacional para López Obrador, junto con la creación de certidumbre en cuanto a políticas públicas.

Concluyó este tema considerando que el gobierno de Enrique Peña Nieto ha sido muy exitoso en generar confianza hacia el exterior.

El mensaje hacia afuera, que impacta mucho al tipo de cambio, es: sabemos lo que hacemos, estamos haciendo las cosas bien y los cambios que podremos implementar son sensatos.”, dijo en la entrevista.

El director general editorial de ‘El Economista’ destacó que no es imposible disponer el cálculo de 500 mil millones de pesos que requeriría el gobierno de Andrés Manuel López Obrador para su primer año de Gobierno.

Opinó que es “irrebatible” que se debe aumentar el gasto social público al considerar las carencias que existen, aunque aclaró que también deben mejorar los niveles de inversión pública, la cual ha estado en sus menores niveles desde hace cuatro décadas, durante los últimos tres años.

Necesitamos lo mismo un Gobierno que atienda carencias que un Gobierno que produzca crecimiento. No hay manera, con los niveles de inversión que tiene México públicos y privados, que alcancemos las tasas de crecimiento que requerimos, 3, 4 o 5 por ciento.”, dijo González.

El gran reto es generar los ahorros sin matar la inversión. Cuando vemos las finanzas públicas que entrega este Gobierno, buena parte de la disciplina se logró a costa de no invertir y evidentemente es importante el gasto social pero también es importante la inversión pública”.

González también calificó a la reforma energética como un cambio importante, pues es uno de los grandes detonadores de inversión, necesaria para México, pues activa la inversión privada sin inversión pública.

Ante el anuncio de la centralización de las compras en el Gobierno, realizado por el próximo secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, durante una entrevista en julio, Luis Miguel González dijo que la consolidación de ciertas compras como medicamentos, tiene un beneficio. Sin embargo, dijo que hay otro tipo de compras menores, como papelería, que no tiene mucho sentido concentrar.

Apuntó que los proveedores que no se encuentren en la zona metropolitana de la Ciudad de México se verían en desventaja con respecto a proveedores locales, de centralizarse las compras, pues los costos de los traslados serían mayores.

Creo que sí hay un mensaje de centralización que es complicado de asimilar, pero junto con este mensaje está el de eficiencia. No necesariamente concentrar es más eficiente. Uno de los retos que tendrá el próximo Gobierno es aprender a utilizar todos los botones que están en la consola de control”.

Sobre las tasas de interés en Estados Unidos y cómo afectan a México, dijo que el nivel de las tasas de interés al alza en Estados Unidos desde 2015, es uno de los factores externos que afectan más a la economía mexicana, pues un tercio de la deuda total del Gobierno está denominada en moneda extranjera.

Estamos dependiendo de esa variable para estimar cuánto es destinado al pago de intereses”, dijo, y agregó que “un quinto del presupuesto total se dedica al pago de intereses, y es gasto no programado, o sea, es dinero del que no se dispone”.

El desempeño de las llamadas economías emergentes como Turquía o Sudáfrica también afecta a México, Luis Miguel González argumenta que los inversores pintan con “brocha gorda” el desempeño y no distinguen entre unas y otras.

Las economías emergentes están ligadas, pintadas con brocha gorda por los inversionistas internacionales. No todos los distinguen, y el riesgo de una crisis de una contaminación desde Turquia afectaría a Mexico. Le pegó más del 2 por ciento al tipo de cambio.”

Con información de Estrictamente Personal

asa.