En Juchitán, Oaxaca, cientos de familias comenzaron la reconstrucción de sus viviendas, tras el terremoto de 8.2 grados, del pasado 7 de septiembre.
Sin embargo, las familias zapotecas enfrentan un grave problema, la falta de albañiles y la insuficiencia de material para la construcción, además de un notable incremento en los precios.
“Ha subido el costo de la arena, la grava, el acero, el cemento también. No tengo exactamente calculado el costo de los materiales, pero lo estoy viendo arriba de un 25%, a lo mejor y estamos llegando al 30% del costo”, destacó el señor Ignacio Saltillo Matus.
Familias de Juchitán retrasan reconstrucción de casas por precios elevados y escasez de albañiles. (Noticieros Televisa)
Hace apenas unos días comenzaron los trabajos de reconstrucción en la casa de Arturo, en el Barrio de Cheguigo, en la Octava Sección de Juchitán.
Únicamente pudieron conseguir un maestro albañil para levantar nuevamente su casa y él tuvo que hacer el trabajo del peón, para poder avanzar.
“Estuvimos más de mes y medio buscando el albañil pues no había. Apenas empezamos hace tres semanas, Anduvimos buscando chalán, pero al último le dije a mi mamá pues que yo iba a trabajar acá y aquí estoy trabajando”, dijo Arturo Nieto Pérez
Dicen los habitantes de Juchitán que un maestro albañil pasó de cobrar 250 o 350 pesos a 500 por día, mientras que un peón incrementó su precio de 200 hasta 400 pesos por día.
“Sí, porque esta durísima la situación, esa casa está peligrosa y tiene mucho polvo, por eso es que están cobrando. Aquí hay un sueldo de mil 800 a la semana, pero lo subieron porque está peligrosa la casa”, detalló el maestro albañil Tomás Pin Manuel.
A pesar del incremento en los precios de la mano de obra y los materiales, muchas familias siguen contratando a los trabajadores de la construcción.
Familias de Juchitán retrasan reconstrucción de casas por precios elevados y escasez de albañiles. (Noticieros Televisa)
El problema es que, todos los albañiles de Juchitán, e incluyendo los de otros municipios de la región del Istmo, son insuficientes para hacer frente a la demanda de trabajo.
“En Juchitán hay dos mil 419 casas ya demolidas y si empezaran a construir necesitaríamos dos mil 500 albañiles, que no los hay, y necesitarías siete mil peones, entonces es un poco difícil la cuestión de la mano de obra”, destacó Germán Peralta, regidor de Obras Públicas de Juchitán, Oaxaca.
El envío de material para la construcción también enfrenta retrasos en la entrega, con periodos de hasta un mes para cada una de las viviendas donde es solicitada.
Las complicaciones para la reconstrucción apenas empiezan, cuando todavía faltan alrededor de cinco mil viviendas por demoler, tan solo en Juchitán.
Con información de Jorge Morales
KAH
