Se escucharon otras dos explosiones, una de las cuales fue la detonación de un chaleco por un suicida.
Entre los muertos se encontraban un coronel de la policía y un exlegislador, así como dos de los cinco atacantes, dijo el capitán Mohamed Hussein vía telefónica desde el lugar.
Hussein agregó que efectivos de seguridad combatían a los extremistas que se atrincheraron en el último piso del hotel Nasa-Hablod, que queda cerca del palacio presidencial y es frecuentado por políticos y otros integrantes de la élite de Mogadiscio. Por la noche, los atacantes lanzaron granadas y cortaron la electricidad del edificio.
Las explosiones ocurrieron dos semanas después de que más de 350 personas murieran al estallar un camión bomba en una calle congestionada de la capital, el peor ataque en la historia del país.
Al Shahab, el grupo extremista islámico más mortífero en África, se apresuró a tomar responsabilidad por el hecho y dijo que sus combatientes estaban dentro del hotel. Al caer la noche, se pudo escuchar tiros esporádicamente, mientras los soldados respondían.
“Creo que eran combatientes de Al Shahab que trataban de tomar por asalto el hotel”, dijo en su cama de hospital, donde recibía tratamiento por heridas leves en un hombro y la cabeza, provocadas por vidrios rotos.
Con información de AP.
RAMG