ACCIDENTES

Explosión en Tlahuelilpan: Aumenta a 117 cifra de muertos

La noche de este lunes, el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, confirmó que la cifra de muertos por la explosión del pasado 18 de enero en Tlahuelilpan se elevó a 117.

Por la mañana, el titular de la Secretaría de Salud (Ssa), Jorge Carlos Alcocer Valera, precisó que a la fecha permanecían 32 personas hospitalizados debido a la gravedad de sus lesiones.

Agregó que de los 32 lesionados que hospitalizados, cuatro de ellos están en instituciones del Estado de México, tres en nosocomios de Hidalgo, y tres menores de edad fueron trasladados a clínicas especializadas en atención a quemados en Galveston, Texas, Estados Unidos.

En Punto recuerda a cuatro de estas personas: Luis Alberto Cipriano Clemente, Emmanuel Francisco Mendoza Ramírez, Julio César López Pérez y Adrián Dorantes Pacheco.

“Lo bonito era que pues en la calle ibas y todos te saludaban todos te decían ‘adiós'”, recuerda la esposa de Luis Alberto Cipriano, habitante de Tlahuelilpan.

Detrás del payaso “Zapatito”, popular en Tlahuelilpan por el show que presentaba con su familia, estaba Luis Alberto Cipriano clemente, de 35 años de edad. El día de la explosión, lograron reconocerlo de forma casi inmediata.

“Él tenía prótesis dental y una señora grita aquí están los de la prótesis. Me enseñan sus lentes y me dice ‘¿estos son sus lentes?’. Le digo sí. Estaban tirados a un costado de él”, señaló la esposa de Luis Alberto.

Su esposa, la payasita “Maloski”, asegura que Luis acudió a la toma clandestina como parte de los preparativos de su trabajo.

“Teníamos show para el sábado y él me dice, ‘¿tienes gasolina?’, le digo yo creo que muy poquita, le digo, tenemos la gasolinería del otro lado, pero la habían estado cerrando”, recordó la esposa de Luis Alberto Cipriano.

En el lugar también estaba Manuel Mendoza, de 18 años de edad. Su padre Emmanuel, al enterarse de la explosión en la toma clandestina, salió a buscarlo.

“Él estaba en su casa, estaba en su casa porque hasta el carro lo dejó abierto”, comentó Arnulfo Mendoza, hermano de Emmanuel.

El joven apareció, pero Emmanuel no. En redes sociales comenzó su búsqueda y alguien publicó una credencial de elector quemada. Horas más tarde, un sobrino confirmaría su identidad entre los cuerpos rescatados.

“La medallita de la Virgen de Guadalupe trae el nombre de su esposa atrás. Todavía la llevaba al cuello”, dijo Mario Arnulfo Mendoza, hermano de Emanuel.

Emmanuel tenía un nixtamal, un expendio de cerveza y también trabajaba en una cerillera desde hace 19 años y tenía un miedo.

“Él me lo dijo una vez, ‘nunca me gustaría morir quemado'”, compartió Mario Arnulfo, su hermano.

La misma suerte corrieron Julio César López Pérez, de 23 años de edad, y su sobrino Adrián Dorantes Pacheco, de 17.

Raymundo, hermano y padre de ambos, recuerda que les había prohibido acercarse a la fuga de combustible, pero no hicieron caso.

“Voy a ir, le digo, no, no vayas. Un cliente que le prestó los garrafones para ir a traerla y me dijo, yo no se los iba a prestar, pero es una persona muy insistente”, señaló Raymundo Dorantes.

Los dos fallecidos eran aficionados al futbol, devotos de la Virgen de Guadalupe y trabajaron juntos durante una temporada en el reparto de gas LP. Ahora sus restos descansan en el panteón municipal de Tezontepec.

“Siempre juntos, nunca se apartaban, cualquier lado que iba el otro ahí iban los dos”, recordó Raymundo Dorantes, familiar de los fallecidos.

Con información de Carlos Guerrero y Sarahí Méndez.

LLH

Con información de Noticieros Televisa.

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