CRIMEN Y SEGURIDAD

Familiares de víctimas exigen renuncia de Rosario Piedra, titular de la CNDH

Activistas y colectivos feministas han realizado pintas en la sede de la CNDH, como manifestación por no obtener respuesta de las autoridades ante sus casos

Familiares de víctimas y colectivos feministas, que mantienen tomadas las instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en el Centro de la Ciudad de México, exigieron la renuncia de la titular, Rosario Piedra Ibarra.

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La sede principal de la CNDH permanece tomada por familiares de víctimas y activistas que quemaron objetos e hicieron pintas en paredes y muebles, como protesta por la falta de respuesta a sus demandas.

Con el paso de los días, familiares de vÍctimas e integrantes de colectivos se adueñaron de las instalaciones; entre sus denuncias figura el presunto hallazgo de kilos de carne de primera calidad, al interior de la CNDH.

Entre las personas que tienen tomadas las instalaciones de la CNDH se encuentra Yesenia Zamudio, madre de Marychuy, víctima de presunto feminicidio en 2016, quien exigió la renuncia de la titular de la CNDH, María del Rosario Piedra Ibarra.

“De hecho lo hemos venido pidiendo desde tiempo atrás, pero como nos ignora esa señora no sabe para qué está ahí. Esa señora es un dedazo que sirve otros intereses menos el de la víctima”, afirmó la señora Zamudio.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos hizo varios exhortos a las víctimas y activistas a sostener mesas de diálogo, a entregar las instalaciones y ofreció su intervención en apoyo a sus demanda

Rosario Piedra, titular de la CNDH, fijó su postura y reiteró su disposición “a dialogar con los colectivos que enarbolan una serie de demandas, todas ellas atendibles y que estamos dispuestos a apoyar”.

Tras la acción reivindicativa, México con 73 mil desaparecidos y donde más del 90% de los delitos no se denuncian por desconfianza a la autoridad, la presidenta de la CNDH, Rosario Piedra, despachó desde otra oficina de la entidad. La semana pasada lo hizo en la sede ocupada, por los manifestantes.

Los parientes de víctimas, a los que se sumaron colectivos feministas, llegaron el viernes al lugar. Una activista se ató a una silla y emprendió una huelga de hambre, dando inicio simbólico al movimiento, al que poco a poco se adhirieron otras personas que exigen el esclarecimiento de sus casos.

“No que no, sí que sí, no nos vamos a salir”, gritaron frente a la sede de la CNDH, donde fueron colocadas pancartas con decenas fotografías de víctimas de desaparición forzada, homicidio, violación y otros delitos.

En lo alto del edificio instalaron un letrero con el mensaje “Casa de refugio, ni una menos México”, en alusión a los feminicidios o asesinatos de mujeres por razones de género, que subieron un 5.4% entre enero y julio en el país, en relación con el mismo período de 2019.

La semana pasada, cuando estallaron las protestas, Marcela Alemán, cuyo hijo fue asesinado el año pasado, dijo: “No me importa lo que pase, quiero justicia para Alan”.

AMLO critica reacción de las feministas

“Yo sí entiendo de que hay mucho dolor y las víctimas de la violencia están, con razón, muy dolidas y que tienen derecho de manifestarse, pero no creo que esa sea la mejor forma de hacerlo”, dijo el lunes durante su conferencia de prensa diaria el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.

El mandatario criticó las pintas realizadas a un cuadro del expresidente Francisco I. Madero, ícono de la Revolución Mexicana y uno de sus referentes políticos. “El que afecta la imagen de Madero, o no conoce la historia, lo hace de manera inconsciente, o es un conservador”, dijo.

Con información de Noticieros Televisa y agencias.

RMT