SALUD

Estancias infantiles de la Sedesol, un lugar seguro para los niños

La estancia infantil de la Sedesol es literalmente la segunda casa para los niños cuyos padres tienen que trabajar o no tienen seguridad social. Los menores pasan en promedio ocho horas en la institución, de las nueve de la mañana a las cinco de la tarde.

 

Tienen entre un año y tres años 11 meses de edad; que es la edad límite en estancia, después pasan a preescolar.

“Aprendemos jugando, esa es la finalidad de las maestras enseñar sin que haya llantos, sin castigos, ni regaños, aquí por ejemplo la destreza de poder formar una figura de plastilina, este bien o mal esfuerzo del pequeño”, explicó Belén Pérez, responsable Estancia Infantil Sedesol.

El balbuceo y el parloteo se escucha durante la mañana. Parece un trabajo tan practico, pero solo especialistas están en condiciones de atenderlos.

A las 10 de la mañana se sirve el desayuno, después hay juegos y actividades de recreación; por cada 8 niños hay una maestra.

“Estar al tanto de cada uno de los niños, no perderlos de vista, ni para ir al sanitario”, señaló Belén Pérez.

Es importante tomar en cuenta que para que sea un lugar seguro para los niños se cuida que no exista ningún objeto o lugar en donde los niños corran riesgo, si hay vidrios estos deben ser resistentes o cubiertos por una reja.

Los números de hospitales y servicios de emergencias deben estar a la vista de todos.

Si hay escaleras, se cuida el acceso con un barandal y todos los muebles deben ser de bordes redondos.

La ubicación de la estancia debe ser en una zona vecinal en donde no existan riesgos.

“Me voy tranquila, sé que mi hijo está bien, si sufriera algún maltrato no le gustaría venir y a mi hijo le gusta venir a la escuela”, comentó Janet, madre de familia.

Con información de Guadalupe Madrigal

MAP