CRIMEN Y SEGURIDAD

Venden alcohol afuera de Teotihuacán; argumentan anuencia de las autoridades

Mientras adentro de la zona arqueológica de Teotihuacán se escuchaban los caracoles, a no más de 20 metros de la puerta dos del lugar se oía música de rock.

Frente a la zona turística de Teotihuacán se instala un mercado en donde por cada 10 puestos, nueve son de venta de bebidas alcohólicas.

Litros de cerveza y pulque se vendieron, los comerciantes, dicen, cuentan con permiso de las autoridades municipales. Y así es, porque la Policía nada les dice.

Los comerciantes pagan una cuota al municipio para que se les permita vender.

Hay basura en las calles que rodean el complejo arqueológico y la zona de acampar se convierte en sanitario público.

El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) sólo es responsable de lo que ocurre al interior de la zona arqueológica. Por eso no se permite el acceso con bebidas alcohólicas.

Los comerciantes que están adentro están controlados y si se mueven de la zona que se les asigna se les retira el permiso.

Este 21 de marzo, a pesar de que el equinoccio de primavera fue ayer, el INAH reportó la asistencia de 10 mil 113 personas.

La mayoría subió a la pirámide.

Se mantuvo la seguridad en la zona, para evitar algún daño a los vestigios arqueológicos.

Los servicios de emergencia atendieron a personas deshidratadas y algunas más por lesiones leves.

 Durante los tres días ya llevamos un total de 232 atenciones, van desde la descompensación metabólica, hasta dos o tres por caídas al interior del monolito de la Pirámide del Sol”, explicó Erasmo Martínez, integrante de emergencias del Edomex.

Los danzantes se fueron, la zona arqueológica cerro, pero la venta de bebidas alcohólicas siguió por el resto de la tarde.

Con información de Guadalupe Madrigal

MAP