El sonido del caracol anunció la llegada de la primavera.
María Concepción Olalde, danzante, comentó: “Año tras año venimos porque estamos recibiendo el nuevo Sol, que en muchos lados es año nuevo. Es la primavera donde reverdece la vegetación, florecen las flores y los arboles empiezan a revestir porque es un año nuevo”.
En el pueblo mágico de Peña de Bernal, en el estado de Querétaro, los danzantes iniciaron al ritmo de los tambores, el encendido del fuego nuevo para dar la bienvenida a una nueva estación.
Jorge Rodríguez Vega, danzante, señaló: “Este ritual es llevado desde nuestros antepasados, desde que se inicia el fuego nuevo Mexica, el año nuevo Mexica. El fuego nuevo es como decir el año nuevo, recibir la nueva estrella de amanecer, recibir esa bendición de que volvió a amanecer este día”.
Respirar el olor del incienso, el sonar de los caracoles en los pies y penachos de todos colores en la cabeza de los danzantes llenaron de buena vibra la celebración…
Estela Martínez, danzante, dijo: “Lo que yo hago es prender un sahumador para hacer el saludo a los vientos, para pedir permiso a la dualidad, a los elementos para hacer nuestro trabajo”.
María Concepción Olalde, danzante, indicó: “Vestida así normal soy una persona y así con mi atuendo soy otra, porque la pluma, el hueso de fraile, los cascabeles, la vestimenta, significa para nosotros mucho respeto, mucha devoción”.
Cientos de visitantes recibieron una nueva energía y que los hizo renacer a la naturaleza.
Fernando, niño turista, expresó: “A mí se hace como un bonito regalo de Dios, es una cultura que me gusta mucho de México, para mi simboliza algo muy hermoso aquí”.
Roberto Barrera, turista, opinó: “Recibir la primavera y recibir toda la energía positiva que se encuentra en ese lugar.”
Esta celebración logró reunir a más de 20 mil personas que comparten el deseo de bienestar y tranquilidad.
Con información de Bertha Alfaro.
RAMG
