En Juchitán, Oaxaca, inició el desmantelamiento paulatino de algunos albergues que atendían a las familias damnificadas por el terremoto del pasado 7 de septiembre.
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En las últimas horas, algunos han sido levantados en su totalidad, mientras que otros continúan operando.
De acuerdo con el Gobierno de Oaxaca, al inicio de la emergencia eran 11 los albergues consolidados que se instalaron en la ciudad, para atender a unas 70 mil personas.
Con el avance de la normalización, 5 continúan funcionado con normalidad.
Yomaira aún se encuentra refugiada en el campo de béisbol de la Segunda Sección, donde permanecen 50 personas.
“Con el apoyo de aún del personal de Sedena y Sagarpa pues estamos aquí saliendo adelante”, dijo Yomaira Gómez Montaño, damnificada.
En el albergue del Instituto Tecnológico del Istmo, el fin de semana fue retirada la cocina comunitaria.
Se retiraron los consultorios móviles y se levantaron las sillas en el resto del campamento.
“El servicio médico empezó a disminuir, hasta ayer que ya no hubo pues, ninguna atención, la cocina se fue, la cocina grande que tenían los militares hace 10 días”, externó Miguel Martínez López, damnificado.
Tres albergues funcionan sólo como cocinas-comedores, mientras que dos más ya son administrados por los propios damnificados.
Con información de Jorge Morales.
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