La sequía extrema que afecta la región del Istmo de Tehuantepec, en Oaxaca, amenaza las actividades productivas de la región.
Según las autoridades, desde hace tres años no ha llovido, lo que ocasionó una grave falta de agua potable.
“Sí, la situación es crítica, totalmente, la situación realmente es alarmante, de hecho, es la situación más problemática en todo el país, ninguna otra parte del país tiene la sequía tan severa como la del Istmo de Tehuantepec”, afirmó Benjamín Hernández Ramírez, director general de la Comisión Estatal del Agua.
Los efectos de la sequía se notan en la presa Benito Juárez de Jalapa del Marqués.
En los últimos meses ha descendido tanto su nivel, que se encuentra por debajo del 15 por ciento de su capacidad.
Con el agua de esta presa se riegan más de 20 mil hectáreas de cultivos de frijol, maíz y sorgo que en este momento están en riesgo de perderse.
También está en riesgo la actividad pesquera, de la que sobreviven miles de familias en Jalapa del Marqués.
Los pobladores aseguran que esta sequía se presenta cada diez años y es la tercera vez que ocurre.
“Ha estado demasiado pobre el agua, ya ves que todos estamos sufriendo, el pozo de El Mojito ya se secó”, afirmó Francisco Mendoza Lozano, habitante de Jalapa del Marqués.
Esta semana, el Gobierno de Oaxaca solicitará a la Federación que se amplíe la declaratoria de emergencia de 28 a los 41 municipios del Istmo por la falta de agua.
Mientras tanto, la Comisión Nacional del Agua anunció que se destinarán casi 350 millones de pesos para la perforación y rehabilitación de pozos, para poder hacer frente a la sequía.
Con información de Jorge Morales
LHE
