El consejo científico que aconseja al Gobierno francés advierte de un aumento de la circulación del coronavirus y de una relajación de las medidas sanitarias por parte de la población, lo que podría conducir a que el país caiga en una situación como la que vive España.
Te recomendamos: Preocupa aumento de COVID-19 en España, Francia y Reino Unido
En uno de sus informes periódicos publicado ahora, pero con fecha del 27 de julio, el consejo científico también considera “altamente probable que se observe una segunda ola epidémica en otoño o en invierno” y que en ese caso la respuesta tendrá que ser diferente de la que hubo en la primera.
A más corto plazo, hace hincapié en que en Francia “el equilibrio es frágil y podemos bascular en cualquier momento en un escenario menos controlado como en España, por ejemplo”.
A ese respecto, recuerda que desde comienzos de julio las autoridades españolas tuvieron que dar marcha atrás en la desescalada con un confinamiento de más de 200.000 habitantes en Lleida, en Cataluña, y en 14 municipios de A Mariña, en Galicia.
Personas sin cubrebocas observan exposición sobre reconstrucción de Notre Dame en París. (EFE)
Desde el 24 de julio, Francia desaconseja viajar a Cataluña por el empeoramiento de las condiciones, aunque no hay prohibición ni se imponen cuarentenas a los que entran en el país procedentes de allí.
Los autores del documento subrayan que “Francia se encuentra en una situación controlada pero frágil” con una mayor circulación del virus este verano y que “el futuro de la epidemia a corto plazo está en gran medida en manos de los ciudadanos” con el respeto de las medidas de prevención.
A su parecer, uno de los grandes retos está en las 20 grandes ciudades del país, en las que el riesgo de propagación es importante por su fuerte densidad de población y para las que habría que prepararse para la posibilidad de un “confinamiento local” en función de la evolución.
El consejo científico había establecido cuatro posibles escenarios para la desescalada, que van desde el más favorable, una epidemia bajo control, al más adverso con una pérdida de control que podría conducir a un nuevo confinamiento generalizado para evitar una gran mortalidad.
En su último boletín actualizado este lunes, el Ministerio de Sanidad indicó que en las últimas 24 horas se habían identificado 556 casos positivos, lo que significa 191.295 desde que existen registros.
En paralelo, había este lunes 182 focos activos, cuatro más que la víspera y 5.198 personas estaban hospitalizadas por la COVID-19, de las cuales 384 en las unidades de cuidados intensivos de los hospitales.
