La Policía irrumpió este domingo en varios centros de votación en Barcelona, Girona y otras ciudades catalanas para tratar de impedir el referendo de independencia.
Se incautaron urnas y papeletas en medio de disturbios y disparos de balas de goma contra civiles.
En protesta por la actuación policial, los principales sindicatos y asociaciones de Cataluña convocaron a una huelga general el próximo martes.
De acuerdo con el Gobierno catalán, el 96 por ciento de las casillas lograron abrir, aunque subrayó que ningún centro de votación tenía red y que los sufragios se anotaban en papel.
Al momento, 844 personas han resultado heridas.
Según el Gobierno catalán se emitieron más de 2 millones 262 mil votos, de los cuales 90 por ciento, 2 millones 20 mil votos, apoyan la separación de España.
Por la noche, el jefe del Gobierno regional de Cataluña, Carles Puigdemont, celebró el referendo.
Ante una multitud reunida en Barcelona, aseguró que el tema de independencia dejó de ser un asunto español, para convertirse en un tema europeo.
Subrayó que millones de personas se movilizaron a pesar de lo que llamó “amenazas del estado español”.
Sea cual sea el resultado del referéndum, el Gobierno español señaló que no reconocerá su legalidad, que considera como inconstitucional.
Desde el mes pasado, el Tribunal Superior de Justicia de España ordenó la suspensión de la consulta por parte del Tribunal Constitucional.
Durante la jornada, el líder del Partido Socialista de España, Miquel Iceta, pidió al Gobierno detener los operativos policiales en Cataluña.
Llamó al diálogo entre independentistas y las autoridades.
Consideró que los incidentes entre votantes y policías ocurrieron debido a la incapacidad de negociar.
Con información de FOROtv
JLR
