El hacinamiento, la lluvia y las necesidades que van en aumento, han hecho que los roces y las riñas crezcan al interior de los albergues de migrantes centroamericanos en Tijuana.
Los migrantes del albergue El Barretal no solo riñieron por el reparto de la ropa. Se quejan sobre cómo se organizan dichas donaciones.
“Son unos malditos perros, dense a respetar perros, malditos hondureños dense a respetar, parecen perros, lástima dan, dan lastima como hondureños, yo soy hondureño, pero lastima dan, dense a respetar”, dijo un migrante.
Migrantes riñen por el reparto de las donaciones y también por no querer acatar las reglas de la autoridad local de Tijuana.
“Está prohibido fumar marihuana sobre todo delante de los menores de edad, creo que eso a estas alturas ya lo saben. Pasen y pídanle a alguien por favor, con más respeto a uno. Contamos con su colaboración”, dijo un funcionario de Tijuana a un migrante.
Es sentido común, tienen hijos
También, entre los centroamericanos crece la molestia por el reparto de donaciones.
“Hay zapatos, cobijas, cajas de campaña, toldos, agua y no han dado nada aquí. Todo lo que viene de la gente de afuera lo tienen ahí”, apuntó un migrante centroamericano.
“Ahí ya está lleno ya ni cabe no dan nada. Solo los que están ahí saben que hacen con las cosas, un mismo gringo que trajo donaciones dijo yo las voy a repartir acá en fila porque yo sé que no les dan nada”, expuso un migrante centroamericano.
“Si no mejor nos vamos a poner en la entrada y cada que llegue una donación que la entreguen en las manos de uno de cada persona. Todo lo nuevo se lo quedan. Nomás entregan un papel y toallas”, añadió una migrante centroamericana.
“Nosotros estamos muy bien sabidos que somos inmigrantes y qué tal vez no tengamos el derecho consideramos que necesitamos que nos den esas donaciones. Vemos que las cosas entran y nosotros tenemos necesidades, pero no entran después de que entran a la bodega”, destacó un migrante centroamericano.
Actualmente más de dos mil 500 migrantes continúan albergados en El Barretal y más de 200 permanecen en el campamento de Benito Juárez.
Con información de Elizabeth Mávil.
LLH
