El embajador de Corea del Norte en Lima, al que Perú dio un plazo máximo de cinco días para abandonar el país, aseguró este martes que la decisión peruana “echa la gasolina al fuego” y no contribuye a la paz mundial.
“La medida bilateral y diplomática tomada ayer por el gobierno peruano carece de la razón jurídica y moral y no ayuda en nada a la paz y seguridad del mundo”, dijo el embajador Kim Hak-Chol leyendo una declaración frente a las cámaras de la televisión en la puerta de la embajada norcoreana en Lima, en la que no se admitieron preguntas de la prensa.
La decisión de Perú de exigir su salida del país viene seguida de una decisión similar adoptada por México la semana pasada luego de que en agosto el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, pidiera a Brasil, Chile, México y Perú romper lazos diplomáticos y económicos con Norcorea para aumentar el aislamiento al régimen de Kim Jong-Un y acabar con su programa nuclear.
El primer secretario de la embajada norcoreana en Lima, Pak Myong Chol, dijo que el embajador “respeta las leyes peruanas” y abandonará Perú en el plazo fijado por la cancillería local. Precisó que las relaciones diplomáticas entre ambas naciones se mantienen.
Cuando Perú declaró el lunes al embajador de Corea del Norte en Lima “persona non grata”, agregó en un comunicado que Pyongyang “viene violando reiterada y flagrantemente las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas e ignorando los constantes llamados de la Comunidad Internacional a cumplir sus obligaciones internacionales, a respetar el Derecho Internacional y a finalizar de manera irreversible y verificable su programa nuclear”.
Perú inició relaciones diplomáticas oficiales con Corea del Norte en 1988 durante el gobierno del entonces presidente Alan García Pérez.
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