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Ely, la última elefanta en los Zoológicos de la Ciudad de Mexico

Ely llegó al Zoológico de Aragón, con problemas de piel, una dermatitis, que es contrarrestada con el tratamiento que se le da diariamente.

  • Ely fue liberada de la prisión circense, cuando en la Ciudad de Mexico se prohibieron los animales para espectáculos
  • Aparentemente tuvo una fractura en el circo y eso provocó que la pata este rotada

Sigue en plena recuperación Ely, una elefanta africana que llegó al Zoológico de San Juan de Aragón, en el 2012, luego de haber sido liberada de la prisión circense, cuando en la Ciudad de Mexico se prohibieron los animales para espectáculos. 

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“Tiene un problema en la pata, estamos pensando que fue posiblemente de la cadena, que estuvo mucho tiempo encadenada, pero no tiene marcas de la cadena, la pata tiene un poco desviada, estuvo mucho tiempo encadenada en los circos”, dijo su cuidador Marco Antonio Badillo.

Antes de las 10 de la mañana la bañan.  Marco Antonio Badillo, es su cuidador, desde hace 9 años.  

Mientras el agua cae por su lomo y la relaja, desayuna una gran coctel de frutas. 

Luego cepillan su lomo, porque ahí tuvo una lesión en el circo. 

“Tenía lesiones en lo que es el dorso, son lesiones con las que llego, si se dan cuenta está mejorando su piel hasta el momento”, afirmó Marco Antonio Badillo.

Ely llegó al Zoológico de Aragón, con problemas de piel, una dermatitis, que es contrarrestada con el tratamiento que se le da diariamente. 

“Le hacemos lo que es el baño, la aceitamos con glicerina y vaselina liquida para que se humecte y no tenga problemas de lesiones. Es importante el baño en los elefantes esto se hace diario”, señaló Badillo.

Finalmente pasa a una área en donde limpian sus patas, que también son humectadas diariamente. 

“Ahorita tiene 38 años de edad, lleva nueve años con nosotros, cuando llegó tenía algunas lesiones con las que hemos ido trabajando y ahora está muy recuperada, de repente se puede notar que camina chueco de una de las manitas, de su manita derecha, sin embargo, es una lesión que tiene un adecuado nivel de recuperación”, afirmó Valeria Aguilar, directora de Operación científica y Técnica, Dirección de Zoológicos de la CDMX.

Aparentemente tuvo una fractura en el circo y eso provocó que la pata este rotada, pero con el tratamiento y manejo adecuado, dicen sus médicos, ha mejorado. 

“Ella tiene un suelo especial que es de neopreno, ese suelo es como suavecito, es como traer skechers o algunos zapatos suaves, ortopédicos que le ayudan a evitar demasiado presión en sus patas”, refirió Valeria Aguilar, directora de Operación científica y Técnica, Dirección de Zoológicos de la CDMX.

Vive en un exhibidor de 3 mil 800 metros. 

Durante el día se mueve por esta zona, que es en donde le dan de comer y a veces juega. 

“Es una elefanta feliz, tiene todas las necesidades cubiertas, tiene alimentación, tiene alojamiento, tiene salud, tiene compañía, está protegido de cualquier peligro ¿comportamientos naturales como cuáles? Caminar, buscar su comida, estirarse para alcanzar las ramas altas de los árboles, revolcarse en la arena, cuando quiera, es una joya biológica para que el pueblo de la Ciudad de Mexico, la vea, comparta con ella, aprenda de elefantes ¿estrés? Si”, destacó Gerardo Lopez Islas, director del Zoológico de San Juan de Aragón.

Con información de Guadalupe Madrigal

KAH