ECONOMíA

Elecciones en Francia y economía de EU marcan el rumbo de segundo trimestre

La primera ronda de las elecciones en Francia y la medición inicial del desempeño económico de Estados Unidos en el comienzo del gobierno de Donald Trump servirán para establecer el tono de los mercados la próxima semana y delinear su rumbo en el segundo trimestre, luego de cierta pérdida de entusiasmo en el arranque del año.

En la elección presidencial francesa del domingo se espera que Emmanuel Macron y Marine Le Pen pasen a una segunda ronda a celebrarse el 7 de mayo, en la que el candidato centrista vencería a la ultranacionalista. Esto alentaría a unos mercados algo decepcionados por la falta de reformas en Estados Unidos.

Pero los inversionistas no descartan una votación mejor de lo previsto de Le Pen, que golpearía al mundo financiero. “Las encuestas no son indicadores perfectos de la realidad (…) hay una serie de resultados que son peligrosos para la zona euro”, dijo Rick Rieder, jefe de renta fija global de BlackRock.

Para el producto interno bruto (PIB) estadounidense del primer trimestre, el escenario central es optimista. Si bien la expansión prevista en un sondeo de Reuters es de 1,5 por ciento, una tasa baja, los analistas creen que se debería a motivos estadísticos y no refleja la pujanza del empleo. El reporte inicial del PIB trimestral será difundido el 28 de abril.

En todo 2017 la economía de Estados Unidos se expandiría 2.3 por ciento, lo suficiente como para generar puestos de trabajo sin requerir más alzas de tasas de la Reserva Federal que las dos restantes para este año, dijo el economista Jim O’Sullivan de High Frequency Economics.

Los anuncios de las ganancias empresariales del primer trimestre continuarían siendo otro frente de satisfacción para los financistas. Para la semana entrante se esperan los resultados de McDonalds, Coca Cola, y Procter & Gamble, entre otras grandes compañías.

Para los próximos días también están en agenda las reuniones de política monetaria del Banco de Japón (conocido como BoJ, por sus siglas en inglés) y el Banco Central Europeo (BCE). Ambos organismos mantendrían sin cambios sus actuales planes de expansión, ofreciendo previsibilidad a los operadores.

Los temores al proteccionismo global, que asustaron a los inversionistas por la retórica de campaña electoral de Trump, volverían a aparecer en el cierre de los encuentros de primavera del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Washington, aunque todavía está por verse en qué medida podrían materializarse.

 

 

 

tfo