En una videoconferencia desde la sede romana de Scholas Ocurrentes, las escuelas del encuentro, con 7 sedes en el mundo, entre ellas México, el papa Francisco volvió a expresar su cercanía y solidaridad a México con motivo de los dos terremotos de septiembre.
“Para darles a los muchachos a los niños que expresaron con el arte todo el sismo interno que tuvieron. Expresaron con unas cosas verdaderamente dramáticas todo lo que tenían adentro”, explicó Hector Suleiman director de Scholas México.
El papa también se enlazó con la prisión federal número 16 cerca de Cuernavaca, donde las mujeres internas también padecieron los efectos del terremoto. Ellas le escribieron cartas al papa y a los niños de Jojutla diciéndoles que quieren participar de alguna manera en la reconstrucción de México.
El papa Francisco recordó su visita a la cárcel de Ciudad Juárez y les dijo a las mujeres internas que éste es tan sólo un momento en sus vidas y que saldrán del penal fortalecidas y mejores.
“Sigan adelante por ese camino. Sean corajudas como decimos en Argentina. No tengan miedo, no tengan miedo a construir caminos de paz y entendimiento”, dijo el papa.
El papa dialogó con Pedro, un niño de origen michoacano que vive en Texas, quien le preguntó por qué Dios si nos quiere permite que haya calamidades naturales.
“Vos sabéis querido que hay preguntas que no tienen respuesta. Los huracanes los terremotos, tantas cosas que están sucediendo ahora, ¿son solamente cosas naturales o nosotros contribuimos en parte a hacerlas porque no cuidamos el ambiente? No sé responder yo diría parte y parte”, señaló el pontífice.
El papa Francisco también abordó el tema de los migrantes en los Estados Unidos. Una vez más pidió a las naciones que reciban a migrantes y refugiados. A éstos pidió que respeten las leyes de los países a los que llegan.
“Estoy cerca de ustedes, sé que sufren, sé que hay mucha gente que los ayuda, los cuida, mucha gente que no los quiere. Yo soy hijo de migrantes y si no hubiera habido gente que ayudara a mis papás cuando llegó a los 22 años como migrante, yo no hubiera estado aquí hoy”, subrayó.
A los jóvenes dreamers pidió que no se dejen arrancar sus sueños.
“Les deseo que se acerquen a las personas que los quieren bien y los pueden defender en esta coyuntura. No odien a nadie, busquen apoyo en las personas que los pueden defender”.
El papa Francisco también dialogo con jóvenes paraguayos y niños de Puerto Rico afectados por el huracán “María”.
Con información de Valentina Alazraki
AAE
