POLíTICA

‘El Mijis’ ayudará a jóvenes con problemas de drogadicción en SLP

Lo llaman ‘El Mijis’, y en las elecciones del 1 de julio fue electo diputado local en San Luis Potosí, pero él no es como cualquier político.

Pedro César Carrizales Becerra no tiene empacho en mostrar y decir lo que es, un joven que tiene antecedentes penales y estuvo preso por disparar un arma de fuego.

‘El Mijis’ asegura que eso quedó en el pasado desde hace varios años, el virtual diputado electo se reformó y se dedica a ayudar a jóvenes que tienen problemas de drogadicción.

En el 2002 fundó el ‘Movimiento Popular Juvenil’, con el fin de encausar a chicos en situación de calle y también participan miembros de 240 pandillas de México.

Gracias a la labor que emprendió a favor de su comunidad, ganó un escaño en la Cámara de Diputados de San Luis Potosí.

Quienes lo conocen aseguran que su labor a favor de los jóvenes lo llevó a la candidatura local, de la mano de Morena, del Partido Encuentro Social (Pes) y del Partido del Trabajo (PT).

Con la bandera de ‘La discriminación nos borra’, recorrió en su bicicleta el estado de San Luis Potosí, para pedirle a la gente que no lo juzguen por un tatuaje o por haber participado en una pandilla.

Pedro César, ahora de 39 años, tuvo una infancia difícil que lo llevó a integrarse a las bandas callejeras.

Ahora, lo hace de manera diferente, desde las pandillas trabaja desde hace más de una década, en defensa de los derechos de los jóvenes y el combate a las adicciones.

Ha participado en treguas de paz entre pandillas que han sido rivales desde años atrás, con el fin de que disminuya la violencia y la criminalidad.

Es en las redes sociales donde ‘El Mijis’ pide a quienes aún no confían en él, que le den el ‘beneficio de la duda’.

Entre sus propuestas se encuentra:

-Eliminar el registro de antecedentes penales para jóvenes por delitos menores.

-Fomentar el empleo juvenil a través de trabajos temporales, como el pintado de fachadas de los barrios populares.

-Crear programas de ‘inclusión’.

-Convertirse en ‘la voz de los excluidos’.

Con información de Karina Cuevas

LSH