Tres mexicanos que evitaron ser capturados durante un operativo federal de migración del que una alcaldesa del norte de California le advirtió al público el mes pasado, fueron arrestados bajo sospecha de cometer otros delitos, incluido robo, violaciones a las leyes de armas y violencia doméstica, informaron autoridades federales.
En la Casa Blanca, durante una mesa redonda sobre las ciudades “santuario”, el director interino del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas ─ICE, por sus siglas en inglés─ Thomas Homan, dijo que los tres casos son ejemplos de delincuentes que se encuentran ilegalmente en Estados Unidos y que han cometido otros crímenes luego de ser puestos en libertad por las autoridades de California, las cuales limitan su cooperación con los funcionarios federales de inmigración.
El operativo de cuatro días en California atrajo la atención nacional después de que la alcaldesa de Oakland, Libby Schaaf, publicó una advertencia sin precedentes en su cuenta de Twitter el 24 de febrero, en la que dijo que agentes del ICE estaban preparando redadas en el área de la bahía de San Francisco y le recordó a la gente sus derechos bajo la llamada “ley santuario” del estado.
Desde nuestro operativo en San Francisco y Oakland, tres de las personas que no pudimos localizar han vuelto a delinquir”, dijo Homan en la mesa redonda de funcionarios policiales.
El ICE no quiso dar los nombres de los detenidos, pero sí proporcionó algo de información sobre sus casos.
Indicó que uno de ellos, quien ha sido deportado en tres ocasiones, fue arrestado el 2 de marzo en el condado de Sacramento por conducir intoxicado. Anteriormente ya había sido declarado culpable de falso encarcelamiento, conducir intoxicado y golpear a su cónyuge, señaló el ICE.
La Policía de Los Baños, en el Valle Central, arrestó a un mexicano el 5 de marzo bajo sospecha de robo, portar un arma oculta, portar un arma de fuego cargada en un sitio público y descarga voluntaria de un arma de fuego con negligencia flagrante, indicó la agencia.
Anteriormente, debido a las políticas santuario, el individuo fue puesto en libertad en la comunidad, tras su arresto por asociación delictuosa para cometer crímenes y vandalismo en noviembre de 2017″, afirmó la agencia en un comunicado.
Un tercer mexicano fue arrestado el 10 de marzo bajo sospecha de “lesión corporal al cónyuge”, ya ha sido expulsado de Estados Unidos en dos ocasiones y tiene antecedentes delictivos por posesión de drogas, atropellar y darse a la fuga, conducir intoxicado con alcohol y drogas, posesión de equipo para narcóticos y otros cargos, agregó el ICE.
El operativo de febrero en California estaba enfocado en casi 1.100 personas que viven ilegalmente en el país.
Con información de AP
LHE
