El máximo responsable de seguridad de la embajada estadounidense en Cuba fue uno de los 21 funcionarios afectados por el presunto “ataque sónico” sufrido por la misión estadounidense en la Habana a finales de 2016, informaron este lunes medios locales.
Pese a que su identidad no ha sido revelada, el canal CBS informó de que el oficial de seguridad regional, que también actúa como enlace con las autoridades locales, es uno de los afectados y señala que ha precisado de atención médica a raíz del incidente.
Desde entonces, Washington ha elevado a 21 la cifra de personas, entre diplomáticos y familiares, que han sufrido lesiones traumáticas en el cerebro, que en algunos casos han afectado a su dicción y memoria y en otros han provocado pérdidas de capacidad auditiva.
Asimismo, Tillerson dijo haber abordado el asunto en una reunión bilateral mantenida el martes de la semana pasada y confirmó que, como consecuencia de este ataque, que calificó como “muy serio”, el Departamento de Estado ha devuelto a Estados Unidos a algunos de los afectados.
También resultaron afectadas por estos “ataques sónicos” al menos cinco familias de diplomáticos canadienses en Cuba, según aseguró la semana pasada la radiotelevisión pública canadiense (CBC).
FJMM