La escena hizo las delicias de las redes sociales y tal vez quede como lo más destacado de las celebraciones de Pascuas de la era Trump en la Casa Blanca: Melania llamando discretamente al orden a su marido, Donald, para que pusiera su mano en el corazón mientras entonaban el himno de Estados Unidos.
Cuando sonaba el himno nacional, Barron y Melania pusieron instintivamente sus respectivas manos derechas sobre el corazón, pero el presidente no reaccionó inmediatamente.
Con un ligero movimiento de la mano, la primera dama, exmodelo de origen esloveno, le recordó al 45° presidente de Estados Unidos que no mantuviera los brazos a lo largo del cuerpo cuando sonaba el Star-Spangled Banner.
FJMM