Al recibir a Netanyahu en el Kremlin para el inicio de sus negociaciones, Putin enfatizó el alto nivel de confianza entre ellos. La visita de Netanyahu a Moscú sigue a sus conversaciones el mes pasado con el presidente estadounidense Donald Trump.
Netanyahu elogió el papel desempeñado por Rusia en la lucha contra el grupo Estado islámico y otros extremistas radicales en Siria. Al mismo tiempo, expresó su profunda preocupación por la presencia de fuerzas iraníes y de Jezbolá en Siria.
“Una de las cosas contra las que estamos luchando juntos es el terrorismo islámico radical”, declaró Netanyahu mientras él y Putin se sentaban a conversar.
“En el último año hubo un avance significativo en la lucha contra el terrorismo islámico suní radical liderado por ‘Daesh’ y Al Qaeda”, añadió, usando el acrónimo en árabe Daesh para referirse al grupo Estado Islámico.
“Rusia ha hecho una contribución muy importante. Naturalmente, no queremos que este terrorismo sea reemplazado por el terrorismo islámico chií radical liderado por Irán”.
Rusia se ha alineado con Irán y Jezbolá para apoyar al presidente sirio Bashar Assad, pero al mismo tiempo ha mantenido lazos cálidos con Israel. Las dos naciones han coordinado sus acciones para evitar posibles incidentes entre sus propios militares en Siria.
Antes de las conversaciones, el portavoz de Putin, Dmitry Peskov, negó versiones de prensa de que Moscú había dado luz verde a Israel para atacar a Jezbolá.
“Eso no tiene nada que ver con la realidad”, dijo Peskov en una teleconferencia con reporteros. “No se ha analizado ni se ha hablado de eso”.
RAMG