CIENCIA Y TECNOLOGíA

Especialistas advierten de riesgos por socavones y fracturas en Xochimilco

En la Ciudad de México y su zona conurbada existen diversos riesgos geotécnicos, dentro de los cuales se encuentran hundimientos y fracturas.

El 5 de junio del 2006, se registró un boquete de 15 metros de longitud y nueve de profundidad al colapsarse parte del piso del lago mayor, de la segunda sección del bosque de Chapultepec.

Fueron 20 millones de litros de agua los que se perdieron, la cuarta parte del volumen total que contiene este lago artificial, construido hace 53 años.

Más de 2 mil carpas murieron y otras 25 mil fueron capturadas y transferidas a la parte del lago que no se secó.

Especialistas del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Politécnico Nacional (IPN) con equipo especializado trabajaron en el análisis del subsuelo y determinaron que el boquete fue provocado por el reblandecimiento del subsuelo y la existencia de una mina que pasa justo debajo del lago mayor.

Lo sucedido hace unos días en uno de los canales de Xochimilco ubicado en el embarcadero de Zacapa-Nativitas, en el Pueblo de San Jerónimo, donde se registró un boquete de un metro de diámetro por el cual se filtraron millones de litros de agua de los canales, forma parte de las series de hundimientos que ya han sido documentados en estudios del Instituto de Geofísica e Ingeniería de la UNAM.

En Xochimilco hay riesgo de fracturas en Santiago Tulyehualco, San Gregorio Atlapulco, Tepeyac, Las Animas, Santa María Nativitas, Santa Cruz Alcapixca, la Colonia Guadalupita en el pueblo de Santiago Tulyehualco, San Antonio y Jardines del Sur.

La aparición de socavones en diversos puntos de la Ciudad de México se debe, además de los riesgos geotécnicos a hundimientos y fracturas en el subsuelo, a las fugas de tuberías de agua potable y también de drenaje que reblandecen el subsuelo y provocan los socavones.

Con información de Guadalupe Madrigal

MAP