Analistas y comentaristas de todo el espectro ideológico coinciden, se trata de la recuperación política más impresionante de que se tenga memoria en unas primarias en Estados Unidos, pues el exvicepresidente Joe Biden ganó 10 de los 14 estados donde se llevaron a cabo elecciones el supermartes , tres de ellos clave.
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Hasta antes del sábado a Biden se le acababa el dinero, fugaba puntos porcentuales, perdía apoyo y no le veían futuro a su candidatura e invirtió poco en varios estados y algunos ni siquiera los visitó.
Apenas hace unos días la prensa y los expertos dieron por muerta a esta campaña. Después vino Carolina del Sur y eso les dio algo que decir… Y dijeron que las cosas se acabarían para nosotros en el supermartes. Bueno, en una de esas se acaban para el otro ¡candidato!”, manifestó Joe Biden, precandidato demócrata a la Presidencia.
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Ayer Joe Biden empezó ganando Virginia y Carolina del Norte, 2 de los 4 con el mayor número de delegados.
Luego se llevó Alabama, Oklahoma, Tennessee, Minnesota, la tierra de Amy Klobuchar que ésta le puso en bandeja de plata la noche del lunes, Arkansas, Maine y Massachusetts, el estado de Elizabeth Warren en el que la candidata cayó hasta el tercer lugar y el favorito, Sanders, quedó en segundo. Y por supuesto Texas, el segundo estado con más delegados disputados en el supermartes: 228. Ahí empezó el conteo de votos con Sanders a la cabeza, hasta que cerca de las 11 de la noche local ambos tenían el 28.6% y Biden despuntó para ganar.
Bernie Sanders ganó la joya de la corona, California y otros tres: Vermont, Colorado y Utah, pero está todavía fuerte en términos de delegados y de entusiasmo.
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Vamos a ganar la nominación demócrata y a derrotar al presidente más peligroso en la historia de este país”, dijo Bernie Sanders, precandidato demócrata a la Presidencia.
Nuestra campaña refleja la diversidad de este partido y esta nación y así debe ser, porque necesitamos traer a todos a bordo, a todos”, sostuvo Biden.
Aún faltan meses de campaña, primarias en 32 estados y hay varios cientos de delegados en juego hasta que alguno sume 1991 y obtenga la candidatura del partido o no alcancen la cifra y lleguen divididos a la Convención Demócrata de mediados de julio.
Pero antes de eso, como suele ocurrir tras el supermartes, ya hay una primera baja: Michael Bloomberg retiró este miércoles su candidatura y declinó en favor de Biden.
La pregunta es cuándo se retira Elizabeth Warren, que no pudo ganar ni en su estado y en favor de quien declinará. Elegirá la cercanía ideológica sobre la lealtad partidista o dará la espalda a su examigo Sanders.
Después del parteaguas de anoche, para los electores demócratas las opciones van quedando claras y parecen dos: La revolución izquierdista de Bernie Sanders o la moderada restauración reformista de Joe Biden.
Con información de Ariel Moutsatsos
LLH-JLR
