La economía británica está muy rezagada frente a la rápida recuperación de la zona euro, ya que las empresas temen a la salida del país de la Unión Europea y los consumidores sienten el peso de una inflación en alza y una libra debilitada, mostraron sondeos el martes.
Los productores de manufacturas se están beneficiando de una creciente demanda de Europa y de otros países, pero el mucho más amplio sector de servicios del Reino Unido creció en agosto a su ritmo más débil en casi un año, según el índice de gerentes de compra de IHS Markit/CIPS.
La quinta economía del mundo capeó inicialmente el impacto de la votación que en junio del 2016 decidió la salida del país del bloque regional, algo que remodelará los principales lazos comerciales británicos.
Pero el crecimiento empezó a desacelerarse mucho este año, ante un avance de la inflación y un deterioro de la libra que perjudica a las familias. La economía ahora se encamina a una expansión trimestral del 0.3% en julio-septiembre, el mismo ritmo que en los tres meses previos, dijo IHS Markit. La cadencia se está perdiendo lentamente, agregó.
Según sondeos similares también publicados el martes, el crecimiento de la zona euro en el tercer trimestre sería del 0.6 por ciento, igual que en el lapso abril-junio.
El débil panorama de expansión en Reino Unido hará que probablemente el Banco de Inglaterra -que se reúne la semana que viene- mantenga las tasas de interés en un mínimo récord pese a la acelerada inflación.
Otras estadísticas publicadas el martes mostraron que las ventas de automóviles cayeron por quinto mes consecutivo. En tanto, el gasto de los consumidores en supermercados aumentó, pero los minoristas aseguran que se debe en parte a los mayores costos de los alimentos.
El índice de gerentes de compra IHS Markit/CIPS cayó a 53.2 en agosto, desde 53,8 en julio, un declive mayor a la mediana estimada por economistas en 53.5 en un sondeo de Reuters. Fue la lectura más débil desde septiembre del año pasado, poco después del referendo a favor del Brexit. Cuando faltan menos de dos años para la efectiva salida de la UE, Gran Bretaña aún debe negociar con Bruselas temas clave como el comercio.
MFH
