DEBATES Y ENTREVISTAS

Diseño de precampañas limita desempeño de aspirantes, consideran analistas

Guillermo Sesma y Enrique Hernández coincidieron, en Estrictamente Personal, en que el diseño de las precampañas limita el desempeño de los aspirantes, a lo cual se deben sumar los errores de los equipos de cada precandidato. Por ejemplo, “la reacción del equipo de José Antonio Meade, después de que se equivocó al conjugar el verbo resolver y decir resolvido”.

Para Hernández Alcázar se trató de “una estrategia singular de control de daños, porque el bullying desatado en redes sociales fue increíble. Convertiste a Meade en Bart Simpson y los pusiste en el pizarrón; fue, por lo menos, una manera singular de buscar remediarlo”.

Guillermo Sesma consideró que “se trata de un problema estratégico; no puedes presentar a un candidato como el mejor preparado y luego lo presentas castigado como el burro del salón. Hay una disociación entre lo que quieres comunicar y lo que presentas; además, el sarcasmo está mal visto en política. La imagen no presenta a alguien que se ríe, se burla, muestra a alguien compungido por un error que nos puede pasar a todos”.

Insistió en que “tratas de posicionarlo como el mejor preparado y lo castigas satíricamente en una esquina; me parece una disociación, el equipo tiene que preguntarse qué quiere comunicar”.

Enrique Hernández estimó que “esta forma de intentar resolver las cosas muestra algo más profundo que un simple chiste o una anécdota; te muestra la desesperación del equipo de campaña que tiene que salir a resolver y aclarar cualquier error”.

Sesma detalló que hay un problema “porque por un lado quieres mantener la estrategia, pero estos chispazos de creatividad no ayudan, y estoy seguro de que se le ocurrió a alguien que ni siquiera es de su equipo estratégico”.

Señaló que “en unos días vamos a analizar si se lograron los objetivos de precampaña, pero estos chispazos de creatividad no ayudan; y me preocupa que el candidato no se resistió, no dijo que esa estrategia de resolver no lo representa y no está cómodo”.

Más, señaló Enrique Hernández, “con el cambio que dijo Javier Lozano que tendrían, según lo cual el objetivo del equipo es que el precandidato se sintiera cómodo”. Y Meade, insistió Sesma, “no está cómodo. Si quieren ganar, necesitan comunicar lo que es el candidato”. Y qué mal, abundó Enrique Hernández, “que no le hayan hecho caso al experto en estos errores, porque el presidente se equivoca todo el tiempo y no se preocupa, ya lo deja pasar”.

Y luego del error, continuó Guillermo Sesma, “lo vinculas con los personajes que hacen planas, que son el burro del salón y la esposa del exgobernador de Veracruz”. Sesma insistió: “Estoy convencido que los precandidatos tienen gente profesional en sus esquinas, pero estoy convencido de que esta decisión no pasó por esos profesionales”.

En materia de construcción de percepciones, abundó Raymundo Riva Palacio, “en Cancún, Meade se ve totalmente solo”, pero “todos los precandidatos han tenido eventos similares”, acotó Guillermo Sesma, “Anaya tuvo lo mismo en Querétaro. El problema es la precampaña, cómo organizas los eventos, porque están limitados, debes cuidar a quién puedes convocar, qué puedes decir”.

Si bien el diseño de precampañas es una limitante, coincidió Enrique Hernández, “estos eventos los puedes hacer en otro lado, donde no sea tan visible qué tan pequeño es el público”. Además, dijo, “ese lugar es clave, porque hay un exgobernador, Borge, del PRI, detenido por corrupción, y existió la indicación de quitar a los dirigentes del partido de la foto”.

Sesma insistió en que “el diseño de las precampañas te limita; Ricardo Anaya arrancó en Querétaro, en un evento similar, y la fotografía es igual; es un problema con el diseño de las precandidaturas”. Desde su perspectiva, “todos los precandidatos tienen eventos fallidos en precampaña, pero si en la campaña siguen eventos así, entonces es claro que se acabó la carrera”.

Para Lizeth Parra, “el problema de Meade es que está desnaturalizado de sí mismo. Arranca la precampaña y lo visten de chamula; lo llevan con los corporativos y lo insertan en un esquema priista, es la primera vez que lo sambuten en este esquema; y luego lo ponen a hacer planas, como le pasó a Nuño cuando fue el concepto de ‘ler’, y para que sepan que Aurelio Nuño es el jefe de la precampaña lo meten en este esquema, porque Meade es un hombre culto, pero esto es la desnaturalización de su esencia”.

Enrique Hernández subrayó que es un “tema de timing”, cuestionó “dónde empezó la campaña de Meade, en Chiapas, que hoy está deshecho y enfrentado por decisiones que se han tomado en el centro y ahora Andrés Manuel está en Chiapas capitalizando el desorden político y eso se llama timing político, war room y estrategia”.

Guillermo Sesma consideró que “cada precandidato llegó por sus virtudes, y las de Meade no las saben leer, no las captan, ni las capitalizan; él es bueno en foros más chicos, más técnicos, más especializados, y no sé si eso gane elecciones, pero es donde luce él y se siente cómodo. No se ve bien en esquemas de precampaña. Si quieren ganar, van a tener que variar, van a tener que dejar a un lado el chiste; van a tener que dejar el sarcasmo, porque no es bien visto en política”.

Para Enrique Hernández, han “despojado a Meade de lo mejor de sus atributos; lo llevan a eventos públicos que no tendrían que ser; a cambio, Andrés Manuel y Anaya hacen eventos en espacios cerrados, para evitar imágenes de poca gente y evitar comparaciones con tumultos de otras campañas. De cualquier manera, si es control de daños, si es ocurrencia, si no pasa por todos lo tamices, tendrían que saber qué pasa”.

Guillermo Sesma señaló que el equipo de Meade “atiende más a la coyuntura que a su propia estrategia. Con la encuesta de El Universal salen a decir que no es cierta, Enrique Ochoa atiende a la coyuntura y no a la estrategia”.

Enrique Hernández recordó que López Obrador “es especialista en descalificar encuestadores si le convienen o no los resultados; es un asunto de estrategia, porque el precandidato tiene cierta responsabilidad, pero el equipo tiene toda la responsabilidad. Aquí lo platicamos, la idea era construir al candidato y darle herramientas para competir con alguien que lleva 30 años en el proceso”.

Para Guillermo Sesma, “las precampañas han tenido más errores que aciertos. El nuevo spot del Frente, que está fuera de estrategia, con el mismo niño de Movimiento Ciudadano, responde a la coyuntura. La campaña del Frente no ha funcionado, se ha mantenido, pero no ha funcionado, lo que gana Anaya es porque se ha caído el PRI y el que capitaliza es Anaya, pero no es una precampaña exitosa; veo más errores que aciertos; el único que no se ha resbalado es Andrés Manuel”.

 

 

(Con información de Estrictamente Personal)

tfo