Después de encabezar durante varios años la lucha por el etiquetado en bebidas y alimentos para prevenir daños a la salud, Alejandro Calvillo, director de “El poder del consumidor” fue víctima de Pegasus, un sistema de espionaje desarrollado por una empresa de Israel.
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“Se tomaron las imágenes se enviaron a Citizen Lab, que es una Universidad de Toronto, especialistas en eso y ellos descubrieron que esto era el sistema Pegasus; con ese espionaje tenían acceso al micrófono de tu teléfono y en el momento en el que quisieran a la cámara de tu teléfono, y cuando tú hablabas o algo, ellos lo tenían, podían entrar a tus passwords, a todo”, explicó Alejandro Calvillo, director de ‘El poder del consumidor’.
Alejandro Calvillo narra que su celular fue hackeado en el 2016, con dos objetivos: uno, poder espiar su información y sus actividades y otra, amenazarlo.
“Recibí un mensaje un SMS con un teléfono que no identifiqué: decía: Alejandro acaba de salir una nota en ‘Proceso’ que te menciona y se está viralizando y yo la abrí, yo le di a la liga, y la liga me llevó a lo que parecía como una página de Gayosso, una amenaza, yo dije bueno esto fue una amenaza”.
Primero, hackearon las computadoras de las oficinas de “El poder del consumidor”, después se metieron a su teléfono celular.
Un investigador también fue víctima de Pegasus
Dijo que en el sexenio pasado, Pegasus también fue utilizado en contra de Simón Barquera, investigador sobre obesidad y nutrición del Instituto Nacional de Salud Pública.
“Obviamente venía de un contrato de alguien del gobierno de México, después se supo que había una empresa intermediaria en México que compraba y le vendía, de estas empresas fantasmas que ya conocemos en todos los contratos del gobierno mexicano”, dijo Alejandro Calvillo.
Con el apoyo de la Red en Defensa de los Derechos Digitales, organización no gubernamental, presentó una denuncia ante la entonces Procuraduría General de la República.
“Como la PGR era la que compraba estos sistemas de espionaje no ha prosperado la investigación, los abogados han visto los expedientes y no se ha procedido en ninguna de las líneas de investigación”, dijo Alejandro Calvillo.
De acuerdo con The Citizen Lab, de la Universidad de Toronto, el sistema Pegasus se diseñó como una herramienta auxiliar para combatir el terrorismo, pero en realidad se ha utilizado en más de 45 países para espiar a periodistas, opositores y defensores de derechos humanos.
“Eran más de un millón de pesos por cada infección… al ser una organización de consumidores, estamos afectando intereses muy fuertes, de que hay dinero dispuesto para espiarnos, sabemos que existe”, puntualizó Calvillo.
En entrevista realizada este lunes, Alejandro Calvillo dijo estar dispuesto a interponer una nueva denuncia por espionaje ante la Fiscalía General de la República, en compañía de otros activistas espiados.
Con información de Guillermo López Portillo, Noticieros Televisa
AAE
