El Gobierno danés anunció, el lunes 8 de noviembre de 2021, que volverá a considerar el coronavirus una enfermedad “crítica” para la sociedad y reintroducirá el pasaporte covid dos meses después de haber eliminado las últimas restricciones vigentes.
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El motivo es el fuerte aumento de los nuevos casos y de los ingresos hospitalarios, que se han triplicado en un mes y suponen la cifra más alta desde mediados de febrero, aunque todavía menos de un tercio del máximo alcanzado durante la pandemia.
“Las autoridades sanitarias habían esperado que habría más contagio e ingresos, pero todo ha ido más rápido de lo que pensábamos”, afirmó en rueda de prensa la primera ministra, Mette Frederiksen.
La medida ha sido recomendada por el grupo epidemiológico que asesora al gobierno y deberá ser votada mañana por una comisión parlamentaria, pero el Ejecutivo socialdemócrata en minoría se ha asegurado ya el apoyo de sus tres aliados, suficiente para que la propuesta salga adelante.
Frederiksen avisó de que podría haber más restricciones dirigidas a la población no vacunada, sin especificar, pero descartó que pueda haber un cierre de la actividad económica y social nacional, como ocurrió durante las dos primeras olas de coronavirus.
Dinamarca se convirtió el pasado 10 de septiembre en uno de los primeros países europeos en eliminar todas las restricciones, al considerar controlada la pandemia y por el alto nivel de población vacunada, aunque el Gobierno ya avisó entonces de que las restricciones podrían volver si empeoraba la situación.
El 75.3% de la población total danesa ha recibido la pauta completa y, el 6.6%, la dosis de refuerzo.
Dinamarca, que al igual que el resto de los países nórdicos no confinó a su población y usó la mascarilla de forma limitada, presenta uno de los índices por mortalidad de covid-19 más bajos de Europa, con 47.14 muertos por 100 mil habitantes.
Con información de EFE
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