Unas conmovedoras imágenes del reencuentro de un chimpancé del Zoological Wildlife Foundation (ZWF) en Miami, Estados Unidos, con sus cuidadores humanos revelaron la emotiva reacción del primate, llamado Limbani.
Limbani nació con neumonía y fue rechazado por su madre, por lo que Jorge y Tania Sánchez se hicieron cargo de él.
Hace dos meses, Limbani abandonó la casa de la pareja para ser trasladado al zoológico de Miami.
Al ser visitado por sus antiguos cuidadores, Limbani se lanzó gritando a los brazos de éstos y su reacción sorprendió a todos.
El chimpancé corrió a abrazar a Jorge y Tania tan pronto se percató de su presencia.
“Sin la intervención humana y la medicina moderna, él no estaría aquí hoy. Tania y Jorge pueden estar un par de meses sin verle y su reacción es siempre la misma. Limbani es, de lejos, el más amado de la familia de ZWF”, afirmó el zoo a través de Facebook, Instagram y YouTube.
OTRO CASOS DE UN PRIMATE QUE HAN LLAMADO LA ATENCIÓN
El pasado 21 de junio murió Koko, una gorila que aprendió a utilizar el lengua de señas. Tenía 46 años.
La Fundación Gorila anunció ese día con tristeza la muerte de Koko”, según el centro de investigación en un comunicado, agregando que el animal falleció mientras dormía.
Koko era uno de los pocos primates capaz de comunicarse usando lengua de señas, junto a Washoe, una chimpancé en el estado de Washington, y Chantek, un orangután en Atlanta. Sus cuidadores aseguran que entendía también algo de inglés hablado.
Aunque algunos científicos pusieron en duda las supuestas aptitudes comunicativas de la gorila, Koko, quien se convirtió en una embajadora de su especie, amenazada por la explotación forestal y la caza furtiva en sus hábitats nativos de África central.
La Fundación Gorila dijo que Koko impactó en las vidas de millones de personas, al convertirse en un icono para la empatía y la comunicación entre especies.
Era muy amada y la extrañaremos mucho”, señaló la entidad.
Koko nació como Hanabi-ko (“Hija de los fuegos artificiales” en japonés) el 4 de julio de 1971 en el Zoo de San Francisco. La doctora Francine “Penny” Patterson comenzó a trabajar con ella al año siguiente y le enseñó la lengua de señas, indicó la fundación.
Con información de Noticieros Televisa y agencias
AAE
