CRIMEN Y SEGURIDAD

Desalojan a huéspedes de hotel en la colonia Roma por conato de incendio

Un conato de incendio movilizó a los servicios de emergencia de la Ciudad de México, a un hotel de la colonia Roma y provocó el desalojo de sus huéspedes la madrugada de este martes.

El bombero Alan Ramírez explicó que las chispas de los elevadores alcanzaron una de las sábanas, las cuales se prendieron y causaron mucho humo, lo que alertó a todos los huéspedes del lugar.

La mayoría de ellos dormía cuando ocurrió la emergencia.

“El olor fue lo que nos despertó mucho humo, mucho humo y ya bajamos corriendo todas”, narró la señora Laura Patricia Bastar.

“Yo no escuché alarma, solamente alguien fue a pedirnos que saliéramos de la habitación”, dijo el huésped Luz Elena González.

Por la hora en que ocurrió el siniestro, y ante la emergencia, algunos de los huéspedes salieron con ropa de dormir y algunos de ellos con su equipaje.

Luego del trabajo de los bomberos, se descartaron más riesgos y los huéspedes regresaron a sus habitaciones.

¿Qué hacer durante y después de un incendio?

De acuerdo al manual de recomendaciones de Protección Civil, los incendios urbanos se deben principalmente a cortocircuitos en instalaciones defectuosas, sobrecargas o falta de mantenimiento en los sistemas eléctricos, fallas u operación inadecuada de aparatos electrodomésticos; falta de precaución en el uso de velas, veladoras y anafres; manejo inadecuado de sustancias peligrosas y otros errores humanos. Por el lugar donde se producen, los incendios urbanos pueden ser domésticos, comerciales e industriales.

Durante el incendio:

  • Conserve la calma: procure tranquilizar a sus familiares o compañeros de trabajo.
  • Si detecta fuego, calor o humo anormales, dé la voz de alarma inmediatamente.
  • Si el fuego es de origen eléctrico, no intente apagarlo con agua.
  • Los fuegos pequeños producidos por aceite o grasa ocurren generalmente en la cocina; en este caso sofóquelos con sal, con polvo de hornear o con bicarbonato. Si lo que se inflama es una sartén, póngale una tapa.
  • Si el fuego tiende a extenderse, llame a los bomberos o a las brigadas de auxilio y siga sus instrucciones.
  • Corte los suministros de energía eléctrica y de gas.
  • No abra puertas ni ventanas, porque el fuego se extiende con el aire.
  • En caso de evacuación, no corra, no grite, no empuje.
  • No pierda tiempo buscando objetos personales.
  • Diríjase a la puerta de salida que esté más alejada del fuego.
  • Si hay gases y humo, desplácese a rastras y de ser posible tápese nariz y boca con un trapo húmedo.
  • Ayude a salir a los niños, adultos mayores y personas con capacidades diferentes.
  • Antes de abrir una puerta, toque la perilla o manija, o bien la superficie de la puerta; si está caliente no la abra, el fuego debe estar detrás de ella.
  • No use los elevadores.
  • Si se incendia su ropa, no corra; tírese al piso y ruede lentamente, de ser necesario cúbrase con una manta para apagar el fuego.
  • En caso de que el fuego obstruya las salidas, no se desespere y aléjese lo más posible de las llamas, procure bloquear totalmente la entrada del humo, tapando las rendijas con trapos húmedos y llame la atención sobre su presencia para ser auxiliado a la brevedad.
  • Tenga presente que el pánico es su peor enemigo.
  • Al llegar los bomberos o las brigadas de auxilio, infórmeles si hay personas atrapadas.
  • Una vez fuera del inmueble, aléjese lo más que pueda para no obstruir el trabajo de las brigadas de auxilio.

Después del siniestro:

  • No pase al área de siniestro hasta que las autoridades lo determinen.
  • Haga que un técnico revise las instalaciones eléctricas y de gas, antes de conectar nuevamente la corriente y de utilizar la estufa y el calentador.
  • Deseche alimentos, bebidas o medicinas que hayan estado expuestas al calor, al humo o al tizne del fuego.
  • No vuelva a congelar los alimentos que se hayan descongelado

 

Con información de Guillermo Segura

KAH