POLíTICA

Decenas de palestinos muertos durante protestas en Gaza

El número de muertos por disparos del Ejército israelí en las protestas de Gaza contra el traslado de la Embajada de Estados Unidos a Jerusalén asciende a 52, según datos del Ministerio de Salud palestino, que cifra en 2.410 los heridos, entre ellos 200 menores.

Al menos una treintena de los heridos se encuentran en estado de extrema gravedad, 71 tienen consideración grave, unos 800 de gravedad media y cerca de un millar sufrieron heridas leves.

Más de 918 de los heridos lo fueron por munición real, cinco por balas recauchutada, 98 por restos de metralla, 196 por golpes y contusiones y más de 700 fueron atendidos por asfixia por gases lacrimógenos.

El Ministerio también denunció que hubo disparos contra periodistas y personal médico, por los que un paramédico murió y dos fueron heridos.

Las protestas, convocadas por todas las facciones en el marco de la Marcha del Retorno se han hecho coincidir hoy con el traslado de la Embajada de Estados Unidos a Jerusalén y se espera que continúen mañana, día en que los palestinos conmemoran la Nakba (Catástrofe) que para ellos supuso el nacimiento de Israel hace hoy 70 años.

Palestinos protestan en la frontera de Gaza. (AP)

Las autoridades sanitarias palestinas han pedido a su contraparte en Egipto que envíen a los hospitales de la Franja de Gaza medicinas y material médico de emergencia, así como equipos médicos especializados en cirugía vascular, ortopedia, anestesia y cuidados intensivos, y han solicitado también se autorice la salida de heridos para ser atendidos en centros especializados en Egipto.

Según el Ejército israelí, más de 40.000 personas participaron hoy en las protestas cerca de la divisoria y cientos de ellos trataron de asaltar la verja.

Decenas de miles de palestinos llegaron a la frontera terrestre del enclave costero y algunos se acercaron a la valla israelí, una línea que líderes israelíes dijeron que no permitirían que fuera cruzada por los palestinos. En el aire se levantaban columnas de humo negro de neumáticos en llamas encendidos por manifestantes.

Los manifestantes, algunos armados con hondas, arrojaron piedras contra fuerzas de seguridad israelíes, quienes respondieron con cartuchos de gas lacrimógeno y munición.

Hoy es el gran día en que cruzaremos la valla y le dijeron a Israel y al mundo que no aceptaremos estar bajo ocupación para siempre”, comentó el profesor de ciencias Ali, en Gaza, quien no quiso que se mencionara su apellido.

El Ministerio de Salud palestino acusó a Israel de cometer “una masacre” contra los manifestantes y el ministro, Jawad Awad, hizo un “llamado urgente” a la comunidad internacional para que presione a Israel y que detenga la violencia.

Por otra parte, la Policía israelí detuvo al menos a catorce personas en una manifestación celebrada a pocos metros de la nueva sede diplomática, después de reprimirlas haciendo uso de la fuerza y confiscase las banderas palestinas que portaban.

“Los manifestantes no se atuvieron a los términos acordados con la Policía. Corearon Alahui¡ Akbar (Alá es grande) y la Policía les quitó las banderas, catorce manifestantes fueron detenidos en la escena”, informó el portavoz policial, Miki Ronsfeld.

A partir de las 16.00 horas (13.00 GMT) cientos de personas se acercaron a las inmediaciones de la nueva embajada, una minoría para apoyar su traslado desde Tel Aviv, y la mayoría para rechazar lo que consideran la consolidación de “la ocupación de Palestina”.

Un palestino quema llantas durante protesta en Gaza. (AP)

LA DECISIÓN DE EU PROVOCA LA IRA DE LOS PALESTINOS Y EL RECHAZO INTERNACIONAL

La decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de reconocer a Jerusalén como capital de Israel provocó ira entre los palestinos y críticas de muchos gobiernos extranjeros, que lo consideran un revés para los esfuerzos de paz.

En la ceremonia de inauguración en la embajada, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, agradeció a Trump “por tener la valentía de cumplir con sus promesas”.

Qué glorioso día para Israel. Estamos en Jerusalén y estamos aquí para quedarnos”, dijo Netanyahu en un discurso.

En un mensaje grabado, Trump comentó que sigue comprometido con la paz entre palestinos e israelíes, pero en la frontera de Gaza las manifestaciones palestinas rápidamente se volvieron sangrientas.

Al menos 52 palestinos murieron acribillados por balas israelíes, la cifra más alta en un solo día desde que el 30 de marzo comenzó una serie de protestas para exigir el derecho de los palestinos a retornar a sus hogares ancestrales en lo que ahora es Israel.

Un portavoz del Ministerio de Salud palestino dijo que entre los muertos había seis niños menores de 18 años. Funcionarios de salud dijeron que 900 palestinos resultaron heridos, y unos 450 de ellos habían sido alcanzados por munición.

Francia llamó a Israel a ejercer la mesura y el secretario General de la ONU, António Guterres, dijo que estaba “profundamente preocupado” por los eventos en Gaza.

Estados Unidos inauguró su embajada en Jerusalén. (AP)

Decenas de miles de palestinos llegaron a la frontera terrestre del enclave costero y algunos se acercaron a la valla israelí, una línea que líderes israelíes dijeron que no permitirían que fuera cruzada por los palestinos. En el aire se levantaban columnas de humo negro de neumáticos en llamas encendidos por manifestantes.

Los manifestantes, algunos armados con hondas, arrojaron piedras contra fuerzas de seguridad israelíes, quienes respondieron con cartuchos de gas lacrimógeno y munición.

Hoy es el gran día en que cruzaremos la valla y le dijeron a Israel y al mundo que no aceptaremos estar bajo ocupación para siempre”, comentó el profesor de ciencias Ali, en Gaza, quien no quiso que se mencionara su apellido.

El reconocimiento por parte de Trump de Jerusalén como capital de Israel en diciembre indignó a los palestinos, quienes dijeron que Estados Unidos ya no podría ser un mediador honesto en ningún proceso de paz con Israel.

Los palestinos quieren que Jerusalén Oriental sea la capital del Estado que quieren fundar en la Cisjordania ocupada y en la Franja de Gaza. Israel considera a toda la ciudad, incluyendo al sector oriental que capturó y anexó tras una guerra en 1967, como su “capital eterna e indivisible”, una posición que no cuenta con reconocimiento internacional.

La mayoría de los países dicen que el estatus de Jerusalén -una ciudad sagrada para judíos, musulmanes y cristianos- debería ser determinado en un acuerdo final de paz y que cambiar sus embajadas ahora perjudicaría esa posibilidad.

Las negociaciones de paz para encontrar una solución al conflicto que considere dos estados han estado congeladas desde 2014.

Con información de Reuters, AP y EFE

AAE