El cáñamo es la fibra que se obtiene de las distintas variedades de la planta de la marihuana.
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Se han comprobado sus múltiples usos en los países donde se cultiva, sin embargo, el cáñamo y la marihuana no tienen mucho en común, ya que el cañamo tiene muy poco del psicotrópico THC, que sí tiene la marihuana.
Actualmente, el cáñamo se cultiva a nivel industrial en Europa y en países como Australia, Canadá y Estados Unidos.
Según datos de la Asociación Nacional de la Industria del Cannabis, el cultivo del cáñamo es altamente rentable, pues una hectárea de esta fibra produce la misma cantidad de pulpa para producir papel, que cuatro hectáreas de árboles.
Es decir, cultivar el cáñamo para producir papel podría combatir la deforestación, ya que no se necesitaría talar ni un árbol más, impactando con ello al medio ambiente.
El cáñamo también se utiliza en la producción de etanol, con esta fibra se produce biodiesel con emisiones muy bajas de azufre.
Sus ventajas también están presentes en la industria automotriz, en donde se utilizan 500 mil toneladas de plástico fabricado a partir del aceite de cáñamo.
Además, se pueden producir botellas de plástico que se biodegradan en sólo 80 días.
Y por si fuera poco, las semillas del cáñamo son un alimento muy nutritivo, pues tienen un alto contenido de fibra y seis veces más omega tres que el atún.
El cultivo de cáñamo es lo que se ha denominado en el mundo como la economía verde.
Con información de Karina Cuevas.
ramg
