En una rueda de prensa, el canciller cubano Bruno Rodríguez instó a Washington “a no continuar politizando este asunto, lo cual puede provocar una escalada indeseada” y “enrarecer” las relaciones entre ambos países.
El canciller cubano protestó “enérgicamente” tanto la expulsión como “el pretexto utilizado para justificarla, al afirmarse que el gobierno de Cuba no adoptó todas las medidas adecuadas para prevenir los alegados incidentes” contra la legación estadounidense en La Habana, dijo Rodríguez.
Washington afirma que por lo menos 22 integrantes de su personal diplomático en La Habana fueron objeto de raros ataques, aparentemente con uso de ultrasonido.
Washington y La Habana reanudaron en 2015 sus relaciones diplomáticas tras medio siglo de ruptura y enfrentamiento político, tras iniciar un deshielo durante el gobierno de Barack Obama, antecesor del mandatario estadounidense Donald Trump.
FJMM