Un tribunal de apelaciones, ubicado en Washington, dictó este martes que una menor inmigrante detenida en el estado de Texas, Estados Unidos, pueda abortar “inmediatamente”, después de que un panel de tres jueces retrasara su aborto el pasado viernes.
Así, la corte restableció la decisión de la jueza Tanya S. Chutkan, de la Corte del Distrito de Columbia, que ordenó el pasado miércoles al Gobierno del presidente Donald Trump que dejara abortar a la menor y que hiciera los arreglos oportunos para que el procedimiento pudiera llevarse a cabo esa misma semana.
La menor, que se encuentra retenida en un centro de detención de Brownsville, en Texas, Estados Unidos, cruzó ilegalmente la frontera entre México y Estados Unidos a principios de septiembre estando ya embarazada.
Debido a que la ley de Texas requiere el consentimiento de los padres o una autorización judicial antes de que un menor pueda obtener un aborto, “Jane Doe” -identidad otorgada a la joven para proteger su identidad- fue a la corte y obtuvo la licencia judicial necesaria el pasado 25 de septiembre.
Sin embargo, el Gobierno federal intervino para bloquear su traslado a la clínica y pidió a la joven que visitara un centro de “atención y crisis”, organizaciones manejadas por instituciones religiosas que buscan convencer a las mujeres embarazadas para que tengan el bebé.
La decisión de hoy, que todavía puede ser apelada ante el Tribunal Supremo, estableció que se deben fijar nuevas fechas para que pueda practicarse el aborto de la joven de origen centroamericano.
Con información de EFE.
FJMM