ACCIDENTES

¿Cómo fue el rescate de los niños en la cueva de Tailandia?

La cueva Tham Luang es la cuarta más larga de Tailandia, tiene una longitud de 10 kilómetros de túneles.

Los doce niños y su entrenador, atrapados durante días ahí, fueron encontrados a casi cuatro kilómetros de la entrada principal en un tramo lleno de pasadizos angostos y otros completamente inundados.

Dentro de la cueva y a kilómetro y medio de la entrada los equipos de rescate instalaron el puesto de comando en la llamada cámara 3.

En el tercer kilómetro al interior de la cueva se localiza la intersección del Monje; fue en ese lugar donde los rescatistas encontraron huellas de los menores. Unos metros más adelante se localiza el punto más complicado, se trata de un pasadizo en forma de “U” de 15 metros de largo y 5 de profundidad en el que se acumula agua, barro y escombros.

Para cruzarlo se tiene que librar el punto más estrecho, de unos 40 centímetros de ancho en el que los rescatistas deben retirarse el tanque de oxígeno para poder pasar.

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Una vez superado este punto, los siguientes 400 metros pueden hacerse a pie y en algunos lugares es necesario escalar, posteriormente deben recorrerse 130 metros de buceo para llegar a Playa Pattaya, el lugar donde inicialmente se creía que podían estar los menores.

Sin embargo, fue necesario bucear 400 metros más para llegar al islote en el que fueron encontrados el pasado 2 de julio.

Este recorrido, pero a la inversa, es el que tuvieron que hacer los menores con ayuda de los rescatistas para salir a la superficie y el procedimiento fue el siguiente:

Cada niño fue acompañado por dos buzos, uno adelante y otro atrás, que se guiaron con líneas de vida. El primero cargó el tanque de oxígeno del menor y lo guió a través de los pasadizos; el segundo era un apoyo en caso de que surgieran dificultades durante el recorrido.

Los niños que en esta semana recibieron clases de natación y buceo usaron máscaras que les cubrían toda la cara lo que les permitió respirar de forma natural.

Con información de Emmanuel Rosalez

AAE