La presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación desencadenó homicidios y desapariciones en Nayarit tras el exterminio de narcomenudistas de cristal. Madres de víctimas y colectivos narran sus temores y desconfianza en las autoridades.
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Como Ciudad Juárez y Guanajuato, Nayarit es territorio en disputa de los grupos criminales para controlar la venta de cristal. El Cártel Jalisco Nueva Generación busca quedarse con la zona que alguna vez dominó Juan Francisco Patrón, el H-2, y que heredó su hijo después de que fue abatido en 2017 por la Marina y para lograrlo, ha desencadenado homicidios y desapariciones.
“Yo oía que golpeaban a varios. Con el rifle me daban en el dedo de los pies, cachetadas. Tablear es que te den con una tabla pesada, de esas de tarimas, en las sentaderas”, dijo Joel, un consumidor de cristal en Nayarit.
El Cártel Jalisco Nueva Generación emprendió en Nayarit el exterminio de sus contrarios, los narcomenudistas de cristal, la droga dominante. Para obtener información sobre cómo operan, hombres armados intensificaron los secuestros contra lo que resta del grupo criminal de Los H, anterior brazo de los Beltrán Leyva en el estado, liderado por Juan Francisco Patrón Sánchez, el H2. También van contra los vendedores independientes, llamados Chapulines, consumidores como Joel y Eduardo, y personas sin relación con estas actividades.
“Me golpearon la espalda, los brazos y los pies, y me dice: “Te vamos a soltar ahorita, te confundieron. Sí sabemos que hay una demanda contra nosotros, ahora sí te vamos a matar”, narró Miguel, sobreviviente de tortura en Nayarit.
“Fue torturado, levantado por agentes fiscales de ahí del restaurante, que dijera qué grupo delictivo era donde surtía la droga ahí donde él trabajaba. Creí en la ley y en realidad estamos viendo que todos están coludidos”, afirmó Verónica Bironche, madre de desaparecido.
Nayarit es paso obligado en el tráfico hacia el norte porque se encuentra entre los bastiones de los cárteles más poderosos: Jalisco y Sinaloa. La autoridad calcula que cada 72 horas en la entidad circulan unas 60 mil dosis de cristal, principalmente en la capital, Compostela y Bahía de Banderas. Cada dosis cuesta en promedio 200 pesos.
“Tenemos reportes diarios de esos levantones. El número de gentes que tiene es mucho muy importante, al grado que les permiten a ellos poder situarse en una plaza, controlar la venta”, dijo Petronilo Díaz Ponce, fiscal general de Nayarit.
La detención en Estados Unidos del exfiscal Édgar Veytia, no hizo que las desapariciones cesaran. En la actual administración, las familias han hallado al menos 15 fosas con más de 100 cuerpos, sobre todo en terrenos del municipio de Xalisco y cuentan además en este año al menos 200 personas desaparecidas. Tan solo en mayo pasado, se llevaron de su casa a Carlos Francisco Jiménez González, exescolta del fiscal Petronilo Díaz.
“Algo supo, algo vio, que no le pareció, que mi hijo estuvo 15 días ahí en la Fiscalía, sin registro, cuando lo desaparecieron, a los 15 días, creo que lo entregaron al crimen organizado”, señaló Adriana González, mamá de desaparecido en Nayarit.
Los colectivos dicen que no confían en la Fiscalía Estatal porque el titular nombró subfiscal a Rodrigo Benítez Pérez, cercano al exfiscal Veytia, quien a su vez propuso a Yayori Denise Villasana, quien trabaja en la institución desde hace años, como titular de la Fiscalía de desaparecidos. Las familias habían acordado que se retiraría a todo funcionario relacionado con la administración pasada.
“Veytia tenía incondicionales, tenía comandantes. Varios de esos comandantes todavía siguen en funciones, en otros municipios. Nayarit es un cochinero, esa es la mera verdad”, insistió Santiago Pérez, del Colectivo Familias Unidad por Nayarit
En un video difundido en redes, presuntos miembros del Cártel de Sinaloa acusan de delitos tanto a Rodrigo Benítez Pérez como a Daniel Saucedo, notario público y cuñado del gobernador Antonio Echevarría García.
“Hay de todos. Ofrecimientos económicos, presión por algunas gentes del gabinete, que hubiera algún tipo de entendimiento con los cárteles”, agregó Javier Herrera Valles, exsecretario de Seguridad Nayarit.
“No tenemos absolutamente ningún involucramiento y ningún acuerdo con las organizaciones delincuenciales. Presiones siempre va a haber, de todo tipo”, concluyó Petronilo Díaz Ponce, fiscal general.
Con información de Guillermo Rivera y Adrian Tinoco
KAH
