Cinco cohetes cayeron en la noche del miércoles 9 de junio en la base aérea de Balad, en el norte de Bagdad, dos de ellos cerca de los locales de una empresa estadounidense de subcontratistas, informó a la AFP un funcionario de los servicios de seguridad.
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“No hay víctimas ni daños”, precisó el funcionario bajo anonimato, en esta base donde los estadounidenses mantienen los aviones F-16 iraquíes, regularmente atacados por cohetes lanzados (según Washington) por los grupos armados pro-Irán.
La empresa Sallyport es la encargada del mantenimiento de los cazabombarderos iraquíes en Balad. Otro concesionario, Lockheed Martin, retiró a su personal de la base el mes pasado, ante los temores por la seguridad.
Al menos tres contratistas extranjeros y uno iraquí resultaron heridos por ataques contra Balad.
Una hora después de que los cinco cohetes cayeron en Balad, otros dos fueron lanzados contra el aeropuerto de Bagdad donde están apostados soldados estadounidenses, informó un funcionario de seguridad a la AFP.
Estos ataques ocurrieron el día en que las autoridades de Irak liberaron a un comandante proiraní, cuya detención dio lugar a una demostración de fuerza de sus partidarios.
Estados Unidos tiene unos 2 mil 500 soldados, de los 3 mil 500 militares de la coalición, en Irak, donde Irán tiene una influencia muy fuerte.
Con información de AFP
GANR
