Choferes de transporte público evitan subir a migrantes en Chiapas

Una docena de migrantes haitianos fueron abandonados en la carretera por el conductor de un autobús

Choferes y dueños de transporte evitan trasladar a migrantes para no ser acusados de traficantes de personas.

Una docena de migrantes haitianos fueron abandonados en la carretera por el conductor de un autobús, metros antes de llegar al puesto de control migratorio de la comunidad Viva México, en Tapachula, Chiapas.

Hombres, mujeres y niños, maletas en mano, caminaron por la Carretera Panamericana, donde se toparon con el retén montado por la Marina y el Instituto Nacional de Migración (INM).

Luego de ser detenidos, los ingresaron a las camionetas conocidas como ‘perreras’, donde había más migrantes haitianos detenidos. El vehículo iba a su máxima capacidad.

En otra ‘perrera’ iban migrantes originarios de India, quienes fueron bajados del transporte público.

En el aeropuerto de Tapachula, se reforzaron las medidas de seguridad. Ahí fueron detenidas cinco mujeres, dos adultas y tres menores de edad, y fueron enviadas a la estación migratoria Siglo XXI.

Iban a salir a Ciudad de México, la señora de nacionalidad cubana, nada más traen pasaportes, no traen formas migratorias que acrediten su legal estancia. Las personas de Guatemala si compraron boletos y traen documentos apócrifos, credencial de elector para votar falsas”, indicó Carlos Alberto López, subdelegado del INM.

Otros migrantes, como esta familia hondureña, vive desde hace 22 días en las banquetas de la calle Cuarta Avenida Poniente. A unos metros de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), donde reciben alimentos de misioneros católicos.

22 días aquí durmiendo, aquí hemos estado durmiendo en esta acera, por los papeles solicitando la credencial, hay que esperar un montón de tiempo un mes y medio más, no podemos trabajar, sin la credencial nadie nos da trabajo. aquí al puro sol y agua pasamos”, dijo José Castillo, migrante hondureño.

“Tenemos dos meses viniendo para acá, la gente que anda en la calle, la gente que no tiene para comer, no tiene hospedaje, es la gente que estamos atendiendo”, comentó Javier López,  misionero de Cristo resucitado.

En el albergue Jesús del Buen Pastor, con capacidad para 250 personas se encuentran más de mil migrantes.

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Con información de En Punto

LHE