El 100% de las iglesias de la Ciudad de México han sido víctima de la delincuencia a través de los llamados pescadores de limosnas.
“Ya no tienen principios morales, ya no les importa de dónde sacar dinero”, dijo Margarita, una católica.
Rosalía, otra católica, aseguró:
“Los robos están ahora sí a la luz del día, es falta de valores”, indicó Rosalía, otra católica.
José de Jesús Aguilar, director de Arte Sacro de la Arquidiócesis de la CDMX, explicó:
“En todas las iglesias hay lo que se conoce como la pesca de anzuelo. Las personas lo que hacen es tomar un cáñamo, le colocan algún tipo de metal plano le ponen un pegamento y a través de la pesca constante pues van pegando billetes, monedas y van vaciando las alcancías. Podemos ver que así trabajan porque muchas veces se les cae el anzuelo dentro de las alcancías y aparece ahí la evidencia”.
Sacerdotes señalan que en una pesca los delincuentes pueden obtener entre 100 y 300 pesos del interior de las alcancías. En la mayoría de los casos no hay denuncia ante las autoridades.
“Ahorita ya no tienen respeto por nada ni por nadie”, añadió Margarita.
Pero éste no es el único robo que ocurre dentro de las iglesias, también roban arte sacro, objetos de oro como cáliz y custodias, y objetos personales de quienes acuden a los servicios religiosos.
“Mire aquí la traigo, yo vengo diario a misa, pero siempre la traigo aquí precisamente por evitar ya no se puede confiar en las personas”, agregó Martha, católica.
También se han presentado asaltos masivos a puerta cerrada.
“Es menos frecuente, pero ha sucedido donde en una iglesia están en una celebración los ladrones cierran la puerta y se llevan las pertenencias de quienes están ahí es más frecuente los robos a oficinas. Recuerdo una en Cuernavaca y otra en Polanco”, añadió el padre José de Jesús Aguilar.
Instalar vigilancia no es un tema que las iglesias descarten.
“El poner policías dentro de las iglesias tendría dos efectos, el primero un costo que no siempre se puede mantener y en otro lado también propicia un ambiente como de miedo, un ambiente de no confianza y no sería lo más correcto, aunque si se llegará a aumentar los robos pues creo que tendría que hacerse”, reconoció.
Las delegaciones donde se han presentado el mayor número de robos dentro de iglesias son a decir de autoridades eclesiásticas Cuauhtémoc e Iztapalapa.
Con información de Elizabeth Mavil.
LLH
