Para asegurar que Carlos Salomón Villuendas, conductor del BMW que chocó en Reforma hace una semana, sea vinculado a proceso y que continúe en prisión preventiva, las autoridades buscarán “establecer el estado de ebriedad del conductor al momento de los hechos”, afirmó Rodolfo Ríos Garza, titular de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX).
En la audiencia de término constitucional “vamos a pedir la vinculación a proceso y solicitaremos que continúe vigente la medida cautelar de prisión preventiva, es decir, que continúe interno”, explicó en entrevista telefónica para Despierta con Loret.
Abundó que, tras el choque, los médicos buscaron privilegiar “el estado de salud de la persona, que fue atendida por el impacto del accidente”. Afirmó que “al ver que los otros tripulantes perdieron la vida, lo que se busca es cuidar su salud y le dieron medicamentos y ocho horas de reposo” con lo cual se puede alterar el resultado de las pruebas que se aplicaron.
Ríos Garza subrayó que cuando Villuendas se negó a que se le hicieran las pruebas médicas para determinar su nivel de alcohol y si había ingerido droga, es responsabilidad de las autoridades respetar sus derechos fundamentales, “pero existen formas de comprobar que existía el agravante”.
Aclaró que el estado de ebriedad en sí mismo es el agravante, independientemente del consumo de estupefacientes, y “eso está debidamente acreditado por el médico legista, por los peritos y por otros especialistas que lo atendieron”.
Por otra parte, dijo, que, para justificar la petición de prisión preventiva, se basarán en la información contradictoria proporcionada por el mismo Carlos Salomón Villuendas. “En unas declaraciones afirmó tener domicilio en la Ciudad de México; en otras dijo que vivía en Cuernavaca. A unos les dijo que era empresario y a otros que trabaja en una nevería y que tiene ingresos por mil pesos más propinas”.
Finalmente, se dijo confiado en que conseguirán que sea ratificada la prisión preventiva “para evitar la sustracción”.
