El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, informó que 21 empleados del Centro de Reinserción Social (Cereso) San Miguel fueron detenidos en relación al hallazgo del cuerpo de un bebé en la basura, al interior del penal.
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En conferencia de prensa, Barbosa señaló que 21 órdenes de aprehensión han sido ejecutadas y tienen que ver con custodios y supervisores.
“Vamos a hacer una renovación completa, así es como se debe de actuar para mejorar las condiciones de esto”.
Aseguró que la inversión pública que se hace en reclusorios es permanente y que su gobierno no ha sido omiso.
Explicó que en otro tiempo se construyó en el Cereso de San Miguel “todo un pueblito”, con decenas de departamentos para alojar a personas en condiciones de privilegio, con prostitución y droga.
“Ladrillo a ladrillo se fue destruyendo todo y hemos mejorado y hemos combatido”.
Sobre el bebé Tadeo aseguró que no se descartará ninguna línea de investigación y que el caso será aclarado.
Barbosa enfatizó que se definirá todo porque su gobierno no tiene ningún vínculo con la delincuencia.
El caso de Tadeo, nacido el 4 de octubre de 2021, estremece a México desde hace dos semanas, cuando un reo encontró el cuerpo del bebé cubierto con cal y dentro de una bolsa en los contenedores de plástico reciclable.
El bebé, que había sido enterrado en un cementerio de la zona de Iztapalapa, en el suroriente de la Ciudad de México, presentaba una herida en el abdomen por lo que una de las hipótesis iniciales era que su cuerpo se había utilizado para transportar droga.
Después se aclaró que la herida correspondía a una operación que se le practicó al menor de edad, quien murió el 5 de enero por problemas intestinales en la Ciudad de México.
Sus padres se enteraron del hecho por los reportes de la prensa, que señalaron que el bebé portaba un brazalete en su muñeca izquierda con sus apellidos.
Este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador, cuestionado por la prensa sobre el asunto, respondió que el caso es un “fruto podrido de la descomposición social, son hechos lamentables que no deberían suceder y tienen que ver con el pasado reciente”, en referencia a los “gobiernos neoliberales”.
El hecho también ha levantado polémica porque la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) se negó a investigar el caso, mientras que el gobernador de Puebla, Miguel Barbosa, advirtió a periodistas y activistas de que “tengan cuidado” al indagar la historia.
Con información de Noticieros Televisa y EFE
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