Tras ejecutarse al menos 204 órdenes de captura, en 14 de los 22 departamentos que conforman la república guatemalteca, en el operativo denominado “Operación Escudo Regional 2”, se logró la aprehensión del coronel Ariel Salvador de León, de 50 años de edad, quien era el subcomandante de la Quinta Brigada Militar de Guatemala.
De León fue capturado en el departamento de Quetzaltenango, a 200 punto seis kilómetros de la capital guatemalteca, a quien según la Fiscalía Contra el Delito de Extorsión, el Coronel de Infantería y Director de Logística del Estado Mayor de la Defensa Nacional del Ejército de Guatemala era el responsable de lavar el dinero en el sistema bancario y luego invertirlo en empresas dedicadas a la compra-venta de vehículos para la Mara Salvatrucha, encontrando casi dos millones de dólares en sus cuentas bancarias personales.
En este operativo en donde participaron dos mil 500 policías, en donde se detuvo a 84 personas, 20 pertenecen a la estructura de la Mara Salvatrucha, una de las más sanguinarias de la Región Centroamericana con células en México, Estados Unidos, Canadá y Europa.
Esta no es la primera vez que un elemento del Ejército guatemalteco está involucrado en delitos relacionados a las pandillas en este país centroamericano. Durante los últimos dos años se han capturado a al menos cinco elementos castrenses vinculados a las maras y al narcotráfico en Guatemala, evidenciando el poderío de estas estructuras criminales en el país.
De nuevo el escándalo vuelve a salpicar al Ejército de Guatemala, cuando el matutino El Periódico, mostró varias fotografías que evidencian a un hombre dentro de una bodega de la Subdirección General de Análisis de Información Antinarcótica, SGAIA, vestido de negro y con el rostro cubierto, tratando de robar unos paquetes embalados como evidencia, que se trataban de 42 kilos de cocaína.
Según datos de la Policía Nacional Civil el atraco ocurrió el 22 de agosto del año pasado, y el hombre que aparece en las fotografías es el teniente Gerardo Pineda Rojas, capturado ese día frustrando el atraco, capturándose también al agente de la PNC, Erick Estuardo Carías Hernández, cómplice del crimen.
Hasta el momento las autoridades del Ministerio de la Defensa Nacional han permanecido en silencio, pero a través de un comunicado indican que reafirman su compromiso de transparencia y lucha contra quien infrinja la ley.
Con información de Lisa María Lou, Noticieros Televisa
AAE
