El sistema de cámaras de vigilancia que grabó la agresión a un convoy del Ejército y el momento en que un civil recibe un disparo por parte de un presunto soldado, pertenece a una red de halconeo electrónico instalada por una banda de huachicoleros en Palmarito, Puebla.
“Esas cámaras las pusieron para ver cuando llega la autoridad o los soldados porque en esa zona está la casa de vidrios de Antonio Valente y esa casa es un corral donde tienen combustible robado”, relató un habitante de Palmarito.
Antonio Valente Martínez Fuentes, alias “El Toñín”, es señalado como el líder de la banda que el pasado 3 de mayo agredió a los soldados cuando acudían a asegurar una toma clandestina de combustible.
“Trae de diez a 12 personas de escolta con armas largas, su dicho es: Conmigo o con el diablo”, dijo un habitante de Palmarito.
De acuerdo con este habitante de Palmarito, la avenida Hidalgo, donde fue agredido el convoy del Ejército, es un corredor de almacenamiento de combustible robado a Pemex.
“Los están emboscando precisamente en esa calle porque es la principal que sale a las casas de Antonio Valente, las casas de los huachicoleros tienen cámaras, todas las casas de huachicoleros tienen cámaras, en contra esquina, en las principales, todo, para ver si llega la autoridad o cuando andan dando sus rondines, ellos saben por dónde salir”, afirmó.
El testigo aseguró que el propietario de la casa donde se encontraban las cámaras de vigilancia, es familiar del líder de la banda de huachicoleros.
“Esas cámaras son de Juan Carlos Fuentes, alias “El Pajarillo”, es un chavo que tiene orden de aprehensión por feminicidio y es primo de Antonio Valente, “El Toñín”, sostuvo.
El testigo narró que el conductor de la camioneta que le cerró el paso al convoy militar es miembro de la banda y reveló que su nombre es Guadalupe Martínez, alias “El Loco”. Agregó que los cuatro ocupantes del vehículo que recibió disparos de los soldados, también tienen vínculos con la organización delictiva.
“Son familiares de Antonio Valente, al que le dieron el tiro es tío de “El Toñín”, precisó.
Durante la emboscada, los soldados repelieron las agresiones que provenían de diferentes puntos de la avenida. Uno de los militares murió cuando un delincuente aprovechó un momento de distracción para sacar un arma corta y asesinar por la espalda al soldado.
En los videos hay un corte de tres minutos entre las 8:33 y las 8:36 de la noche del 3 de mayo, pero en otro video, publicado en redes sociales, se aprecia que, durante esos tres minutos, una camioneta tipo van, de color blanco, se aproxima al lugar mientras los soldados apuntan con sus armas. El conductor apaga las luces, se estaciona y segundos después, se retira en dirección opuesta al lugar donde inició la agresión.
El vehículo permanece en el sitio hasta después de que un presunto soldado disparó a un hombre herido que yacía en el piso.
No se puede determinar cuánto tiempo fue el que los ocupantes de la camioneta permanecieron en ese sitio.
A las diez de la noche con 22 minutos, los soldados retiraron las cámaras de vigilancia.
Con información de Santos Mondragón
LHE
