POLíTICA

Italia permite atracar a barco con inmigrantes, pero sin desembarcar

Los 177 inmigrantes que esperan desde hace cinco días un puerto seguro, a bordo de un barco de los guardacostas italianos, llegarán en las próximas horas a Catania (Sicilia, sur), pero no desembarcarán hasta que la Unión Europea decida repartirlos entre diversos países.

Ésta es la decisión que ha tomado este lunes el Gobierno italiano después de que el barco “Diciotti” de la Guardia Costera italiana haya estado cinco días esperando en el mar, mientras las autoridades de Italia y Malta debatían qué país debía hacerse cargo.

La decisión de autorizar un puerto italiano para los barcos que socorren a inmigrantes en el mar depende del Ministerio de Infraestructuras y también del de Interior.

Así, el ministro de Infraestructuras, Danilo Toninelli, informó hoy en Twitter que el Gobierno autorizaba al barco de los guardacostas llegar al puerto siciliano de Catania.

Pero momentos después fuentes oficiales confirmaron a Efe que “el Ministerio del Interior italiano no ha dado ni dará ninguna autorización (para desembarcar) hasta que no tenga la certeza de que los 177 inmigrantes irán a otros países” comunitarios.

Los inmigrantes no podrán pisar tierra hasta que la UE ofrezca una solución de reubicación para estas personas, igual que se ha hecho en recientes ocasiones, como la semana pasada con el barco “Aquarius”, que atracó en Malta sólo después de que seis países, entre ellos Italia, decidieron acoger a los 141 salvados que iban a bordo.

El ministro del Interior, el ultraderechista Matteo Salvini, está aplicando mano dura contra la inmigración ilegal desde que ostenta el cargo, hace menos de tres meses, con el objetivo de frenar los flujos migratorios que llegan de África a Europa a través de Italia.

Mantiene además los puertos italianos cerrados a las ONG que llevan a inmigrantes salvados en el mar a bordo, pero ésta era la primera vez que el Gobierno italiano impedía llegar a un puerto a una nave de su propia Armada.

El jueves, el barco “Diciotti” se hizo cargo de estos inmigrantes, que habían sido socorridos por otros dos barcos de la Capitanía de Puerto cuando se encontraban en dificultades en aguas de Malta, según el Ministerio del Interior italiano.

El Ejecutivo italiano, formado por el antisistema Movimiento Cinco Estrellas y la ultraderechista Liga, argumentó entonces que debían ser las autoridades de Malta las que se hicieran cargo de estas personas.

Sin embargo, el ministro del Interior maltés, Michael Farrugia, afirmó que su país no tenía la obligación de recibir a estas personas y acusó a Italia de haber interceptado a los inmigrantes irregulares en aguas maltesas, “pero solo para impedirles entrar en aguas italianas”, ya que la embarcación no estaba pidiendo ser rescatada.

Salvini afirmó hoy en una entrevista en televisión que el Gobierno italiano permitiría que estos 177 inmigrantes llegaran a un puerto italiano si después eran repartidos entre los países comunitarios, “bajo el espíritu de la solidaridad de la UE”.

Subrayó también que Italia ya ha cumplido al acoger a más de 700.000 personas llegadas a través del Mediterráneo en los últimos años y reiteró que, si no había respuesta por parte de los Estados europeos, estos inmigrantes serían devueltos a Libia.

Tal decisión violaría los acuerdos internacionales y de la Comisión Europea sobre que ningún barco europeo puede desembarcar a personas en Libia, país que no se considerado un puerto seguro.

Aun así, Salvini justificó que “los acuerdos internacionales, que tienen 20, 30, 40 y en algunos casos hasta 50 años de historia, se pueden cambiar visto que el mundo ha cambiado y también la inmigración”.

La portavoz de la Comisión, Tove Ernst, dijo hoy que la institución está apoyando a Italia y otros países miembros en la coordinación del desembarco de la nave de la Guardia Costera.

Con información de EFE

AAE