El Banco de México publicó este jueves 17 de mayo el informe de política monetaria y anunció que mantendrá sin cambio su tasa de interés interbancaria a un día, ubicándola de nuevo en el 7.5 por ciento. Esto debido a que la política monetaria es congruente para alcanzar una meta de inflación al 3 por ciento.
Señaló que la información disponible indica que en el primer trimestre de 2018 la actividad económica en México mostró una reactivación, registrando incluso una tasa de crecimiento mayor a la observada en el último trimestre del año anterior. Las exportaciones presentaron una trayectoria positiva, mientras que el consumo privado continúa expandiéndose a un menor ritmo. También repuntó la inversión y se consideró que la economía mostraba una estrecha holgura, además de que el balance de riesgos para el crecimiento continúa sesgado a la baja.
Sobre la inflación general anual, el organismo destacó que disminuyó del 5.04 al 4.55 por ciento en abril pasado, por lo que las expectativas de inflación se mantienen ancladas. Esto también se logró reflejar en reducciones de la inflación subyacente y de la no subyacente, las cuales pasaron de 4.02 a 3.71 por ciento y de 8.03 a 7.07 por ciento respectivamente, derivado en buena medida de reducciones en los precios de las frutas, verduras y gas LP, contrarrestadas por el incremento del precio de las gasolinas.
La disminución de la inflación registrada en los primeros cuatro meses de 2018 es congruente con la previsión que Banxico había realizado en su informe trimestral de octubre a diciembre de 2017. Se estima que el comportamiento que presentará la inflación, en el horizonte en el que opera actualmente la política monetaria, está en línea con estos pronósticos.
Sin embargo, se reconoció que el anterior escenario está sujeto a riesgos y una marcada incertidumbre, y que responderá ante cualquier cambio de la cotización de la moneda nacional, presionada por el incremento de las tasas de interés externas, la fortaleza del dólar, la renegociación del TLCAN y el proceso electoral del 1° de julio de este año.
En estos riegos, se considera que podrían afectar los precios de los bienes agropecuarios y presiones en los precios al alza de algunos energéticos. Así mismo, también se consideró que la evolución de los costos unitarios de la mano de obra podría presionar a la inflación. En tanto que otros riesgos, presentados a la baja, se encuentra una apreciación de la moneda nacional en el caso de un resultado favorable en las negociaciones del TLCAN.
Ante este panorama, la junta de gobierno de Banxico decidió de forma unánime mantener su tasa de interés interbancaria en 7.5 por ciento. Esto responde a la postura política monetaria actual, la cual se consideró como congruente con la tendencia descendente de la inflación general anual hacia su meta, que se estableció en el 3 por ciento.
La Junta estableció que mantendrá una postura monetaria prudente y continuará dando un seguimiento especial al traspaso potencial de las variaciones del tipo de cambio a los precios, a la posición monetaria relativa entre México y Estados Unidos, y a la evolución de las condiciones de holgura de la ecnomía.
Con información de FOROtv
KAH
