El avión DC-10 Air Tanker efectúo sus primeras descargas para apagar el incendio que se registra en la Sierra de Santiago, Nuevo León.
Además, refuerza las labores en la línea de riesgo de la Sierra de Arteaga, Coahuila.
Continúa el trabajo de cientos de brigadistas para sofocar el incendio en la Sierra de Santiago Nuevo León, que ya daño más de mil 800 hectáreas de matorral bajo y hojarasca.
Sus esfuerzos han permitido controlarlo en un 50%.
“Tenemos un incendio que es de superficial, se está consumiendo toda aquella hojarasca, material o vegetal muerto que ya cayó como troncos y todo eso, pero el arbusto, el arbusto, los árboles, los pinos, ya sean encinos, todos los árboles grandes no han tenido ninguna afectación, es lo más importante”, dijo Erik Cavazos Cavazos, director de Protección Civil del Estado.
El incendio que inició el pasado 24 de marzo en el cañón de Matacanes, ha puesto en riesgo algunas zonas de cabañas y viviendas.
La fuerza de ataque aumentó a 575 brigadistas que han reforzado trabajos en las líneas de contención.
Por aire constantemente lanzan descargas, 8 helicópteros y para las próximas horas se espera la llegada del avión DC-10 contratado por el Gobierno de Coahuila para contener el fuego en Santiago y evitar que se propague a la sierra de Arteaga.
Si el clima lo permite, las primeras descargas de la aeronave se harían este sábado para proteger una zona boscosa tan importante para ambos estados de México.
Con información de Edgar Martínez
HAVJ
