En la Ciudad De México cientos de personas han entregado armas de fuego de manera voluntaria dentro del programa de desarme del Gobierno capitalino.
A pesar de que el objetivo de los desarmes voluntarios es la pacificación, muchos de los que participan lo aprovechan para deshacerse de armas vinculadas con delitos y además obtienen un beneficio económico.
Juan José tiene 23 años de edad, hace dos años, él y un amigo compraron una pistola que ocuparon para cometer diversos asaltos en el transporte público. Fue en una fiesta durante una riña cuando uno de ellos la disparó e hirió a uno de los asistentes.
“Tomamos la decisión de deshacernos de ella porque en una vez, en una riña pues sí, sacamos la pistola y mi amigo le tiro a este cabrón y entonces pues porque estábamos espantados tomamos la decisión de deshacernos de ella, la andábamos vendiendo, pero por lo mismo de la bronca no se daba”, indicó Juan José.
Luego de este hecho, Juan José y su amigo decidieron guardar la pistola. Por varios meses intentaron venderla, nadie se las quiso comprar porque estaba “caliente”. En febrero pasado, Juan José supo que en la iglesia del Señor de la Cuevita en Iztapalapa se instalaría la campaña de desarme voluntario.
Después de acudir para solicitar informes, regresaron al día siguiente, el arma de fuego la guardaron en una mochila, abordaron el metro y luego un microbús para llegar al lugar. En cinco minutos entregaron la pistola y les dieron mil pesos por ella sin ningún cuestionamiento.
“Nos enteramos de que en Iztapalapa estaban haciendo, bueno compraban las armas, el mismo gobierno te daba dinero por armas y no te investigaban y pues nos fuimos, nos fuimos en el metro y ya llegando allá nos dieron, no nos dieron lo que esperábamos, pero de esa manera nos libramos de la bronca y así lo solucionamos”, añadió Juan José.
“No se investiga y se hace de manera voluntaria porque si no la gente ya no iría a entregar las armas y lo que se trata es de evitar que con esa arma se sigan cometiendo muchos delitos, hay personas que no solamente llegan con un arma, llegan con dos armas, con tres, en alguna ocasión llegaron con 19 armas a un solo lugar y llegaron con armas largas”, comentó Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobierno Ciudad de México.
En dos meses el gobierno de la Ciudad de México recolectó 786 armas cortas, 145 armas largas, 42 granadas, 6 cartuchos dinamita, 706 mil 364 cartuchos y 7 mil 200 estopines. Entre las armas entregadas destacan pistolas 9 milímetros, escopetas, rifles y fusiles AR15, AK47 y un fusil Barret que sirve para derribar aeronaves y penetrar blindajes avanzados.
Durante los dos primeros meses de este año, según la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, se han cometido 173 homicidios dolosos y 286 lesiones dolosas, ambas con arma de fuego.
Con información de Bogdán Castillo.
LLH