CRIMEN Y SEGURIDAD

Ataraxia, escuela donde mujeres imparten instrucciones básicas en defensa personal

La ataraxia se define como un estado de ánimo que se caracteriza por la tranquilidad y la total ausencia de temores; además es el nombre que lleva la escuela de defensa personal para mujeres.

A diferencia de otras escuelas, ésta es llevada sólo por mujeres.

Thalía Jiménez, psicóloga de ‘Ataraxia’, comentó: “Nosotras somos un grupo de amigas que decidimos hacer este curso, y es integral, somos una abogada, una psicóloga y una instructora de defensa personal y nos dedicamos cada quien a aportar sus conocimientos respecto a lo que es la defensa personal”

Un elemento que genera más confianza entre las usuarias, pues al final, la mayoría, ha sido víctima de algún tipo de acoso.

“Todas hemos sufrido en algún momento, en mayor o menor medida algún tipo de violencia, desde piropos en la calle, algún tocamiento, alguna ofensa, no, entonces la idea es no llegar a más”, detalló Thalía Jiménez.

El curso tiene una duración de tres meses, tiempo en el que se les ofrece además de la instrucción básica en defensa personal, charlas sobre psicoeducación en las que se manejan temas de violencia, manejo de estrés y autoestima, así como, asesoría jurídica.

Cualquier mujer puede tomar el curso, a partir de los 14 años de edad, incluso, adultas mayores.

Hay quienes han tomado más de dos cursos, por ejemplo, Adriana, quien no sólo ha logrado perfeccionar la técnica, sino que ha podido demostrar en los hechos la efectividad del curso.

“Iba caminando en la calle, pero ya iba más alerta, ya no tenía el celular en la mano, ya iba yo caminando con mi bolso, y de reojo vi como que alguien me seguía, entonces volteo, me le quede viendo y traía yo las manos abajo, iba ya preparada, pero en el momento en el que ven que te fijaste y los agarras de sorpresa, ya es muy difícil que alguien se atreva a atacarte porque no tiene el elemento sorpresa”, detalló Adriana Zavaleta.

Otras usuarias consideran incluso que tomar un curso de defensa personal ya debe concebirse como una necesidad.

Con información de Karina Cuevas

LSH