POLíTICA

Arturo Núñez cierra gobierno de Tabasco con crisis en el sistema sanitario

Crisis en el sistema sanitario, accesos cerrados a la ciudad de Villahermosa. Protestas diarias en las calles. Así cierra el sexenio del gobernador de Tabasco, el perredista Arturo Núñez.

Desde el 2017, en el Hospital Rovirosa, en Villahermosa, Tabasco, no sirve el tomógrafo.

Micaela Saldaña García, otorrinolaringóloga del Hospital Rovirosa, en Villahermosa, Tabasco, dijo: “Por lo menos hace seis años se contaba con el resonador, ahorita ya ni eso”.

Los hospitales públicos de Tabasco se encuentran en terapia intensiva.

Médicos del sector Salud aseguran que carecen de todo y sobreviven gracias a las donaciones de productos básicos que les llegan.

A pocos días de que termine la gubernatura de Arturo Núñez, doctores del Hospital ’Gustavo Rovirosa’, uno de los más grandes de Tabasco, aseguran que la crisis del sistema sanitario está peor a la que dejó el exgobernador Andrés Granier en 2012, cuando se quedaron sin recursos para adquirir medicamentos y productos de primera necesidad.

Un año después, Granier fue detenido por desviar 196 millones del sector salud.

Lucía Lázaro Pére, secretaria general del Sindicato de Salud de Tabasco, expresó: “Hace seis años por lo menos se tenía jabón, cloro, gasas y lo indispensable. Hoy no se tiene ni eso”.

Aunado a la escasez de material curativo, los médicos federalizados se encuentran en paro de brazos caídos por la falta de pago.

Los residentes también dejaron de recibir su beca y hasta los alimentos les quitaron.

En las últimas semanas, trabajadores de distintas áreas del Gobierno de Tabasco han intensificado las protestas en las calles de Villahermosa; reclaman que les paguen sus salarios y prestaciones.

José del Carmen de la Cruz Gallegos, trabajador del Instituto de Formación para el Trabajo, señaló: “Nos deben desde el mes de junio tuvimos una plática con la directora general y ella no nos asegura ni el aguinaldo”.

Los proveedores de servicios también reclaman su pago y aseguran que la administración de Arturo Núñez les debe desde 2013.

La deuda a los proveedores del sector Salud es de 850 millones de pesos, señala Alberto Falconi, presidente de la asociación de proveedores.

Revela que el gobierno de Tabasco les decía que entregaran notas de remisión y eso era suficiente para comprobar el servicio prestado, pero la Secretaría de Finanzas desconoce esos documentos.

Alberto Falconi de los Santos, presidente Asociación de Proveedores del Gobierno de Tabasco, dijo: “Tuvimos que recurrir a una demanda y federal, la demanda tiene la remisión, la factura, un acta circunstanciada que se hizo en cada hospital”.

Arturo Núñez Jiménez, quien llegó a la gubernatura de Tabasco por el PRD y rompió con la hegemonía del PRI en esa entidad, también deja un estado sumido en la inseguridad, asegura Julia Arrivillaga, directora del Observatorio Ciudadano Tabasqueño.

Cuestiona la falta de resultados en el préstamo de 700 millones de pesos que pidió el Gobierno del estado el año pasado para comprar patrullas, luminarias y hasta un dron de 12 millones, el cual nadie ha visto en Tabasco.

El secretario de Finanzas saliente de Tabasco, Amet Ramos Troconis declinó dar una entrevista a Despierta argumentó que estaba haciendo los cierres de fin de año.

Con información de Luis Pavón

LSH